Emoción y orgullo en el primer desfile de la Orden de la Jarretera con Carlos III y Camilla como Reyes

Es un día muy emocionante en la familia real británica, que ha cumplido con su institucional cita anual en el acto de la Orden de la Jarretera con el castillo de Windsor como gran escenario. Como cada mes de junio, la Nobilísima Orden de caballería más célebre de la nación y la más antigua, con 675 años de existencia, ha celebrado la ceremonia de investidura de nuevos caballeros y damas, en la que sus integrantes participan en un tradicional desfile enfundados en la indumentaria clásica. De igual modo que en otras temporadas, el despliegue en las inmediaciones a la residencia real ha sido absoluto para el evento, en el que se festeja la llegada de nuevos nombres a la exclusiva organización impulsada por el rey Eduardo III y que cuenta con 8 caballeros, 22 miembros y 7 soberanos extranjeros, entre los que sobresale el rey Felipe VI, que recibió la distinción en 2019 o su padre, don Juan Carlos, que lo hizo en 1988.

Esta jornada de lunes que precede a las emblemáticas carreras de caballos de purasangre Royal Ascot ha estado marcada por asistencias esperadas, derroche de gusto y fantásticos looks, alegría, un curioso detalle estilístico e incluso un pequeño percance. Repasamos algunos momentos clave de este soleado e icónico día en Reino Unido

Dos de los indiscutibles protagonistas del honorífico acto han sido la princesa de Gales y el príncipe Guillermo, miembro permanente de la Orden, que han llegado a la cita visiblemente entusiasmados y sonrientes. El feliz matrimonio ha saludado a los allí presentes a su paso, todavía subidos en el carruaje que les ha acercado hasta su destino

La princesa Ana y su marido sir Tim Laurence han llegado a la ceremonia junto a los duques de Edimburgo, Sophie y su marido, el príncipe Eduardo. Las dos parejas reales no podían faltar a la primera edición de la Orden de la Jarretera que se celebra tras la coronación de Carlos III. Minutos después de hacer su entrada triunfal, han bajado del coche en el que iban montados y han esperado, junto al heredero al trono y su esposa y los duques de Gloucester, a los monarcas del Reino Unido

El príncipe Guillermo hace tándem con su tía, la duquesa de Edimburgo

Los duques de Gloucester, el príncipe Ricardo y su esposa, se han unido al resto de asistentes reales con una gran sonrisa dibujada en sus rostros. Para la ocasión, Brígida, que soplará las velas de su 77 cumpleaños en menos de 48 horas, se ha inclinado por un estilismo azul pastel que ha combinado con un llamativo collar de perlas y un favorecedor tocado. Por su parte, el primo carnal de Isabel II ha asistido de igual modo que el resto de caballeros

A los pies de las escaleras que dan paso a la entrada del gran castillo de Windsor, los reyes Carlos III y Camilla han sido recibidos con entusiasmo. Este día es muy significativo para ambos, ya que es su debut tras la coronación y la primera vez que este acto se celebra después de que la reina fuera distinguida como dama de la Nobilísima Orden de la Jarretera el pasado año

Los reyes han acudido luciendo el uniforme protocolario de la Orden y han entrado al castillo con gesto de emoción y paseando sus largas capas forradas y de terciopelo y gran cola. Unos atuendos muy reconocibles por poseer la cruz de San Jorge bordada en la zona del hombro izquierdo y que han combinado con el sombrero bonete con plumas de avestruz a conjunto

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Los estilismos de la princesa Ana, el príncipe Eduardo y el príncipe de Gales han seguido la misma línea que la de los monarcas por ser miembros de la Orden, aunque han agregado su nota personal con los diseños que han lucido bajo los mantos

La inspiración del acto ha aterrizado por dos vías principales: los looks y la diversión, ambos protagonizados por la princesa de Gales y Sophie de Edimburgo. Las dos han lucido espectaculares estilismos y han derrochado sintonía. Mientras la tía del príncipe Guillermo ha apostado por un vestido floral de tirantes y corte midi que ha combinado con un tocado y un fular fucsia, Kate ha escogido un sofisticado diseño de lunares y cuello cerrado que ha llamado la atención. ¿El motivo? El curioso parecido que guarda con el que escogió la reina Letizia para esta misma ocasión hace cuatro años

No es la primera vez que vemos la conexión que existe entre la princesa de Gales y Sophie, pero la efusividad de sus carcajadas ha sido una de las indiscutibles señas de identidad de esta edición. Risas, alegría y motivos de celebración han sido el denominador común de esta procesión, a la que ha precedido un servicio religioso y el acto oficial, festejado en el salón del Trono de la Jarretera del castillo de Windsor

El contraste entre las apuestas estilísticas de los integrantes de la Orden de la Jarretera y los que todavía no forman parte de ella y el júbilo de festejar esta longeva tradición del país han sido muy llamativos. Pese a ello, no todo han sido alegrías, pues un pequeño percance ha empañado la felicidad de la jornada, a la que han asistido mandatarios y rostros de la política como Tony Blair y su mujer, Valerie Amos o John Major

El contratiempo se ha producido a las afueras del castillo de Windsor, cuando un miembro de la Caballería Doméstica ha perdido el conocimiento estando en pie, colocado en la posición reglamentaria. Ha sido entonces cuando varios oficiales de la policía se han apresurado a auxiliarlo 

Afortunadamente, todo se ha quedado en un susto y el histórico evento ha transcurrido con normalidad, dejando como nuevos miembros a la baronesa Ashton of Upholland y lord Patten of Barnes, que han sido investidos. Otras nuevas incorporaciones extranjeras a la Orden han sido Juliana de los Países Bajos, Gustavo VI Adolfo de Suecia y Olaf V de Noruega