El pasado 12 de abril, el palacio de Buckingham confirmaba que el príncipe Harry acudirá solo a la ceremonia religiosa en la que su padre sería coronado Rey, pero que no acudiría junto a su mujer, Meghan Markle, quien se quedaría en California con los dos hijos de la pareja, los príncipes Archie Harrison y Lilibet Diana. Es por este motivo que mientras toda la Familia Real británica estaba de celebración muchos se preguntaban qué estaría haciendo la duquesa de Sussex.
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El sábado, Meghan permaneció en su casa californiana de Montecito celebrando el cuarto cumpleaños de Archie, fiesta a la que se unió el príncipe Harry nada más regresar del Reino Unido, sin embargo, el domingo, mientras que los príncipes de Gales se daban un baño de multitudesacudiendo al ‘Big Lunch’ celebrado en las inmediaciones de Windsor, Meghan era fotografiada, sin la compañía del duque de Sussex, disfrutando de una relajante caminata junto a dos de sus grandes amigos, Markus Anderson, consultor de los clubes privados Soho House, y Heather Dorak, su instructor de pilates y yoga.
Vestida un conjunto deportivo negro que completó con una chaqueta color caqui anudada a la cintura, un pañuelo marrón al cuello y un sombrero de rafia para protegerse del sol, lo que más llamó la atención de sus seguidores fue el colgante que portaba, un trozo de cuarzo transparente tallado a mano firmado por Clarity Retreat, y que es considerado el amplificador de energía más poderoso del planeta. "Está destinado a ayudarte a manifestar lo que quieres en la vida y dejar de lado todo lo que no funciona. Una sutil pieza de cristal portátil para proteger tu paz... para que cada día pueda ser tu retiro" dice la descripción de esta joya en su página web.
La divertida excursión de Meghan se produjo tan solo unas horas después de queel rey Carlos III alzara su copa para brindar en honor del pequeño Archie durante el almuerzo familiar llevado a cabo tras la coronación y al que no acudió Harry, quien ya había puesto rumbo de nuevo a los Estados Unidos nada más finalizar la solemne ceremonia de coronación. A las puertas de la Abadía le esperaba un coche que le trasladó al aeropuerto de Heathrow. "Donde quiera que estés", dijo al parecer el soberano en relación al pequeño, quien vive en California a más de ocho mil kilómetros de su abuelo y se han visto en contadas ocasiones.
La respuesta de Meghan y la pérdida de su hogar en Londres
Cuando se conoció que Meghan no estaría presente en un día tan importante como la coronación de su suegro, se especuló con la posibilidad de que su ausencia respondía a las desavenencias que había tenido con Carlos III y con la Familia Real, situaciones que ha abordado tanto en su entrevista con Oprah Winfrey como en el documental que protagoniza junto a su esposo en Netflix.
Sin embargo, desde su oficina de prensa enviaron a HELLO! un comunicado negándolo. "La duquesa de Sussex vive su vida en presente, sin pensar en cuestiones de hace dos años relacionadas con las conversaciones de hace cuatro años. Cualquier especulación es falsa y francamente ridícula. Alentamos a los medios de comunicación sensacionalistas a detener el circo agotador que ellos solos están creando", se podía leer en el texto.
La última vez que la esposa del príncipe Harry estuvo con los Windsor fue el pasado mes de septiembre, durante el funeral de Isabel II. Se desconoce cuándo será su siguiente encuentro con la realeza, lo que parece claro es que cuando regrese a Londres ya no se alojará en la que fue su casa. Cabe recordar quehan perdido Frogmore Cottage, que pasa a ser a partir de ahora la residencia oficial del príncipe Andrés, que deja Royal Lodge.
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