Londres ha sido este 6 de mayo la capital del mundo. Todas las miradas han estado puestas en la ciudad del Támesis, escenario de un acontecimiento histórico: la coronación de Carlos III, que fue proclamado en septiembre de 2022 tras el fallecimiento de Isabel II. El monarca ha estado rodeado de los Windsor, de jefes de Estado, de autoridades y de líderes internacionales, pero también de los cuerpos de las Fuerzas Armadas ya que es comandante en jefe. El soberano sirvió en la Fuerza Aérea Real (Royal Air Force) y en la Marina Real (Royal Navy) durante cinco años y ahora alrededor de 7.000 efectivos le han acompañado en esta operación ceremonial militar considerada la más grande en siete décadas. Detrás de cada hora de procesión, que deja imágenes para la historia, hay un mes de planificación para que todo salga perfecto.
A lo largo del recorrido por el que han discurrido las dos procesiones, bordeando el camino, hemos encontrado a representantes de los tres ejércitos como los
que proporcionan la Guardia del Rey en el Palacio de St. James y el Palacio de Buckingham, la Guardia del Castillo de Windsor y la Guardia de la Torre de Londres. También a la Guardia de honor, al cuerpo de tambores del ejército y a la banda de cadetes de la escuela militar del duque de York.
El trayecto hasta la Abadía de Westminster
La llamada Procesión del Rey, en la que el monarca y la reina Camilla se han trasladado desde Buckingham a la Abadía de Westminster, ha contado con la participación de aproximadamente 200 militares, en su mayoría de la Escolta del Soberano del Regimiento de Caballería de la Casa Real. Los orígenes de este regimiento se remontan a 1660 y es por tanto uno de los más antiguos del Ejército Británico. Su función es la protección al monarca, actuando como escolta, y realizando tareas ceremoniales. Aúna los dos regimientos más veteranos del británico: Los Life Guards y los Blues and Royals. El recorrido, de algo más de dos kilómetros, lo han flanqueado también militares de los tres cuerpos, tierra, mar y aire.
La Guardia del Rey también ha estado presente. Son tradicionalmente soldados que custodian las residencias reales y suelen formar parte de cuerpos como los Granaderos, los guardias Coldstream, los guardias escoceses, irlandeses y galeses. También ha participado la Mounted band, conjunto militar musical que destaca por tocar instrumentos mientras van montados a caballo.
Regreso a Buckingham tras la ceremonia de coronación
Tras aproximadamente dos horas de ceremonia, los Reyes han hecho el camino a la inversa, desde Westminster a Buckingham. Un recorrido que ha estado guiado por casi 4000 efectivos que representan la diversidad y las tradiciones del Reino Unido y las Fuerzas Armadas de la Commonwealth, 39 naciones representadas con 416 personas que han estado entrenando para este momento en la base militar de Pirbright. Se incluyen en este grupo militares internacionales llegados desde Chipre y Gibraltar, entre otros destinos.
El jefe de las caballerizas reales, conocido en inglés como Crown Equerry, hace una señal al mariscal jefe, quien da la orden de que los bastones y banderas ceremoniales sean izadas. La Real Legión Británica, que brinda apoyo financiero, social y emocional a los miembros y veteranos de las Fuerzas Armadas Británicas, proporciona en esta ocasión una guardia de honor de 100 abanderados que representan a las organizaciones benéficas asociadas.
En este recorrido ha tenido un papel protagonista la princesa Ana, colocada justo después de la carroza ejerciendo como Gold-Stick in-Waiting, la persona a la que se le confía la seguridad personal del Rey. Este cargo se remonta al siglo XV a la época de la dinastía Tudor cuando los oficiales llamados Gold Stick y Silver Stick eran colocados cerca del monarca para protegerlo del peligro.
Entre los participantes, los Royal Watermen, protagonistas de una curiosa historia. Hasta mediados del siglo XIX, los Reyes viajaban por el Támesis en unas barcas reales movidas por los remos de estos watermen. Actualmente el soberano conserva a 24 watermen que tienen deberes únicamente ceremoniales. También escoltan a la Familia Real o a los jefes de Estado internacionales que llegan a Londres por el río. En tierra su labor consiste en actuar como cocheros en carruajes reales mientras que en la Apertura del Parlamento custodian las insignias, como recuerdo de los días en que estos objetos se traían en barco desde la Torre de Londres.
Entre los custodios también ha estado Yeomen, el cuerpo militar más antiguo que existe en Gran Bretaña puesto que fue creado en 1485 por Enrique VII. Existen un total de 73 yeomen, siendo todos ex suboficiales o suboficiales de los Servicios Británicos que participan, por ejemplo, en las investiduras de la Orden de la Jarretera, las coronaciones o los funerales del monarca. No hay que confundirlos con los guardianes de la Torre de Londres conocidos como beefeater a pesar de que su uniforme guarda muchas similitudes. Además, los soldados de infantería, que son los guerreros de combate cuerpo a cuerpo del ejército, están entrenados para estar listos para cualquier cosa, en cualquier momento y en cualquier lugar.
Exhibición aérea desde los balcones del palacio
Desde el balcón de Buckingham, los Reyes y otros miembros de la Familia Real han observado la exhibición aérea de las Fuerzas Armadas, que por la lluvia solo ha durado dos minutos. Aviones, helicopteros y cazas de combate han cruzado el cielo dibujando la bandera de Reino Unido.
En los jardines de Buckingham, además de algunos cuerpos anteriormente citados, se encontraban la Guardia de Coldstream, que forma parte de la División Doméstica del Ejército Británico, uno de los cinco regimientos de guardias de infantería. Actúan como protectores de los palacios reales, incluidos el Castillo de Windsor, el Palacio de Buckingham y la Torre de Londres. Es el regimiento más antiguo del ejército británico en servicio continuo (se formó en 1650) y nunca se ha fusionado. Su uniforme consiste en una chaqueta roja con botones dispuestos de dos en dos, un gorro de pelo con una pluma roja a la derecha.
También estaba la Caballería doméstica (Household Cavalry), regimiento que se remonta a 1660, y los Guardias Granaderos. Es la compañía más antigua dentro de la Brigada de Guardias y, como tal, está sujeta a ciertos privilegios y costumbres que la hacen única. El uniforme de esta unidad de infantería creada en 1652 se compone de un uniforme de gala coronado con un llamativo gorro alto de piel de oso.