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La princesa de Gales dejó escrito la carta de “los deseos” en la que instruía a sus albaceas cómo dividir su juego de joyas personales entre sus hijos -3/4 de su valor- y sus ahijados -¼-, para que sus esposas, en su momento, puedan tenerlas y usarlas, pero, a falta de ver todavía una parte de su joyero, parece que Kate se ha quedado con las mejores piezas. Y tiene todo el sentido. Por un lado, su posición como futura Reina de Inglaterra, por otro la generosidad de Harry cuando quiso que Guillermo sellara el compromiso con el anillo de prometida de Diana. Quizá la joya más famosa del mundo.
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Desde entonces, Kate ha ido sumando al cofre tanto las joyas que Diana llevó durante sus años como princesa de Gales -convirtiéndolas en legendarias- como las piezas personales. Entre ellas, los pendientes de zafiros y una gargantilla a juego, los de perlas y diamantes de Collingwood, un brazalete de perlas, un collar de diamantes. Aunque no llevará ninguna joya ligada al trono hasta que no sea coronada reina, Kate puede pedir prestadas a la reina Camilla algunas de la colección más personal de Isabel II y unirlas al legado sentimental de Diana. Un ajuar impresionante, mezcla de regalos y adquisiciones, con el que Kate podrá rendir homenaje a su suegra.
La diadema de los enamorados
La reina Isabel II regaló la histórica pieza a la princesa Diana con motivo de sus esponsales, en 1981. La Soberana sabía que le encantaban las perlas y Diana convirtió esta joya en una de sus favoritas. La Tiara Lover’s Knot perteneció a la reina Mary y llevaba inicialmente 38 perlas orientales (19 coronándola y otras 19 abrazadas por arcos invertidos de diamantes) hasta que, a petición de la abuela de Isabel II, el joyero Garrard sustituyó las superiores por brillantes (1935). Diana puso de moda las perlas e hizo historia con esta diadema de “los enamorados”: a Kate le gusta esta tiara – fue guardada en la cámara de la Soberana tras la muerte de la princesa-, y como duquesa de Cambridge, además de princesa de Gales, no puede haber una diadema mejor ligada a la leyenda de su título.
Kate la estrenó en 2015 y desde entonces es la pieza que en más ocasiones ha utilizado. No solo tiene un valor simbólico por su historia, sino también económico: está valorada en un millón de euros. Muy francesa en su diseño neo-clásico es una copia de la pieza original realizada para la Princesa Augusta de Hesse-Cassel, cuando casó con el Duque de Cambridge.
Pendiente de Perlas Collingwood
Le encantan las perlas y estos pendientes de lágrima con botón y campana de diamantes están entre sus preferidos. El príncipe Carlos se los regaló a Lady Di con motivo de su Boda y la princesa los estrenó en junio, unas semanas antes de la ceremonia; y los volvió a elegir para el inicio de su luna de miel. La princesa Gales los llevó primera vez en la cena de estado que Reina Isabel ofreció a los reyes de España, en 2017; y fueron sus elegidos para el posado que protagonizó en su 40 cumpleaños. Están valorados en 35.000 euros en el mercado actual.
Gargantilla de perlas de cuatro hilos
Esta pieza realizada por la joyería Garrard era una de las favoritas de la reina y también la llevó la princesa Diana entre las décadas 80 y 90. Es una gargantilla de perlas japonesas de cuatro hilos con un espectacular broche de diamantes que simula un corazón y esta coronado con una flor. La duquesa de Cambridge estrenó esta joya en las celebraciones del 70 aniversario de bodas de la reina y el príncipe Felipe en 2017, y la eligió tanto para el funeral del duque de Edimburgo como para el de la reina Isabel II.
Pendientes de diamantes y perlas de los mares del Sur
Estos pendientes de diamantes y perlas de los mares del Sur siempre estuvieron entre las joyas favoritas de Diana. La princesa de Gales se los puso por primera vez para el Banquete de Coronación del Emperador Akihito y la Emperatriz Michiko de Japón, en noviembre de 1990 y nunca dejó de usarlos, incluso ya divorciada de Carlos III. La parte superior lleva una herradura de diamantes de la que cuelgan dos espectaculares perlas lágrima. Kate los llevó por primera vez en la alfombra roja de los Bafta en 2019.
Pulsera de perlas tres diamantes
Fue diseñada por Nigel Mile en a finales de la década de los ochenta y es una pulsera de tres hilos de perlas unidos por flores. Diana la hizo famosa cuando la eligió para combinar con el vestido blanco de Catherine Walker y la tiara de los enamorados con los que acudió a una recepción en Hong Kong, en 1989. Fue uno de los primeros regalos con “historia” sentimental que Guillermo hizo a Kate -la tiene desde 2008-, aunque fue en 2017, cuando la recuperó a lo grande durante un viaje oficial a Alemania.
El anillo de compromiso más famoso del mundo
El príncipe Guillermo selló su compromiso con Catherine Middleton con el anillo que le regaló el príncipe Carlos a Diana cuando hicieron oficial su relación, en noviembre de 2010. “El anillo de compromiso de mi madre es muy especial para mí. Entonces, lo justo es que estén juntos. Es la manera que tengo de tenerla cerca, de que mi madre no se pierda un día como el de hoy, la noticia y la emoción de que vamos a estar juntos el resto de nuestras vidas”. Diana de Gales lo eligió personalmente en la firma Garrard Joyeros - provee a la Familia Real británica desde 1843- y le acompañó durante toda su vida como princesa de Gales hasta que se hizo oficial el divorcio (1996). La joya, que lleva un zafiro azul ovalado de Ceilán de 12 quilates, rodeado por 25 diamantes, engastados en una banda de oro blanco de 18 quilates. El valor actual es mayor al de 453.000 euros.
Dos pares de pendientes de zafiros y diamantes
Parecen los mismos en corto y largo, pero no los son. Los de doble lágrima llevan zafiros cabujón y diamantes. Y los más sencillos la misma piedra con facetas y también una orla de diamantes. Los primeros fueron un regalo por su boda del Fahd de Arabia Saudí, e hicieron historia en el legendario baile de la princesa con John Travolta; y los segundos, un regalo también de la Casa Real de Arabia Saudí, son hasta ahora los más usados por Kate desde hace una década. De hecho, y durante años se creyó que los había trasformado hasta que recuperó los de doble gota para el Trooping the Colour del Jubileo de Platino de la reina.
Banda de zafiro corazón
Diana llevó este choker con un zafiro y diamantes sobre terciopelo azul, pero Kate, de momento, solo ha usado el corazón. Fue en 2020 cuando la vimos por primera vez por primera vez colgante de zafiro azul, también un regalo de la familia Saudí a Diana con motivo de su boda.
El broche príncipe de Gales
Kate llevó por primera vez el histórico broche con el escudo de armas del príncipe de Gales en noviembre, cuando recibió al presidente de Sudáfrica, simbolizando su estatus y su nuevo título. Está engastado con 18 diamantes y esmeraldas que rodean las tres plumas de avestruz y lleva el lema Ich Dien (Yo sirvo) debajo. La joya -un regalo de bodas para la futura reina Alexandra de las ‘Damas de Bristol’ en 1863, nuera de la reina Victoria-, también fue usada por Diana, aunque casi siempre colgando de un collar.
El choker de esmeraldas y diamantes
Kate nos irá dando sorpresas. Tiene joyas todavía por estrenar y también habrá que ver todo lo que incluye el lote de pasar de las esmeraldas y diamantes…. Abrió esta caja (la de las esmeraldas) durante su reciente visita a Boston, recuperó el choker art déco y lo estrenó en su último viaje a EEUU. Según diferentes medios británicos está valorado en más de doce millones de euros. La gargantilla fue realizada por el joyero Garrard para la reina Mary en 1921, Isabel II la heredó de su abuela y se la regaló a su nuera, tras su boda. Diana la usó por primera vez en octubre de 1982 para asistir a un concierto de Rostropovich. La última vez que la llevó fue en julio de 1997, unas semanas antes del trágico accidente en París. Llevaba guardada 25 años.