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Día histórico en la Familia Real británica con el primer banquete de gala del reinado de Carlos III, que comenzó en septiembre con el fallecimiento de Isabel II. El monarca, acompañado de la reina consorte, los príncipes de Gales y los condes de Wessex, sus grandes apoyos institucionales, acoge este martes la visita de Estado del presidente de Sudáfrica, Cyril Ramaphosa, y su esposa Tshepo Motsepe. Tras una jornada con una completa agenda, el broche de oro es la cena ofrecida en el Palacio de Buckingham, donde todas las miradas se han posado en la reina Camilla y Kate Middleton por sus looks y sus impactantes joyas.
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La esposa del príncipe Guillermo, heredero al trono, ha rendido homenaje a la princesa Diana, la anterior princesa de Gales. Lo ha hecho a través de la tiara The Lover 's Knot, la que más usó la madre de los príncipes Guillermo y Harry. Tras su fallecimiento se guardó en el joyero real y no volvió a usarse hasta 2015. La diadema fue creada en 1914 para la reina María, quien la encargó como réplica de una que usaba su tía, la Gran Duquesa de Macklenburg-Strelitz. Lleva perlas suspendidas en lazos de diamantes e inicialmente tenía perlas en la parte superior que fueron cambiadas por una fila de brillantes. Kate Middleton estaba espléndida con un vestido blanco con estrellas en los hombros.
Por primera vez desde que se convirtió en reina consorte, Camilla también ha lucido una tiara para este banquete. Con vestido azul de manga larga con encaje, la esposa del monarca ha lucido una diadema, con collar y brazalete a juego de diamantes y zafiros que lució Isabel II en 2015 por última vez durante una ocasión muy similar, una cena en honor al presidente de China, Xi Jinping. Anteriormente la llevó durante una visita oficial a Singapur en 1989. El conjunto, conocido como King George VI Victorian Suite, era uno de los preferidos de la histórica soberana ya que fue un regalo que le hizo su padre con motivo de su enlace con Felipe de Edimburgo. En su vestido, además, dos importantes distinciones: la de dama de la Orden de la Jarretera, institución en la que fue investida el pasado mes de junio; y la Gran Cruz de la Real Orden Victoriana.
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El recuerdo a la reina Isabel no solo ha estado presente en el vestuario de la reina Camilla, sino también mediante las palabras de su hijo.El Rey ha pronunciado un discurso en el que ha usado palabras sudafricanas y ha hablado de la vinculación de su madre con esta región. "Mi madre a menudo recordaba su visita en 1947, el año antes de que yo naciera, cuando, desde Ciudad del Cabo en su vigésimo primer cumpleaños, comprometió su vida al servicio de la gente de la Commonwealth", ha asegurado.
El equipo de Buckingham se ha coordinado para cuidar todos los detalles de este evento al que acuden aproximadamente 170 invitados. Se sirve un menú compuesto por dos platos principales: rodaballo a la plancha con setas, trufa y salsa de acedera o balotina de faisán de Windsor relleno de alcachofas, compota de membrillo y salsa de Oporto. Se introduce de esta manera una diferencia respecto a las cenas que ofrecía Isabel II, quien siempre se decantaba por venado o cordero. Como guarnición, los cocineros de palacio han seleccionado zanahorias, col, calabaza asada y ensalada. Como postre, parfait helado de vainilla con manzanas caramelizadas y café.
Como guiño a Sudáfrica se han recreado sus flores típicas, las proteas, en versión comestible. Como curiosidad, se han colocado en la mesa 1700 cubiertos separados por exactamente 45 centímetros de distancia. Para la decoración se han seguido los deseos del soberano británico, que ha elegido personalmente las flores con las que se han engalanado los salones, destacando tipos como ciclamen, nerinas, escaramujos, anémonas, amarilis, crisantemo y hortensias.
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Su agenda en Londres
El presidente de la República de Sudáfrica llegó la tarde del lunes al Reino Unido, donde su agenda oficial ha comenzado la mañana de este martes en el hotel Corinthia, donde lo han recibido los Príncipes de Gales. Juntos se han desplazado hasta el Horse Guards Parade, donde Carlos III y la reina consorte han dado la bienvenida al mandatario. y posteriormente se han desplazado en coches de caballos hasta Buckingham. Ya por la tarde, Cyril Rampahosa ha estado en una exposición de la Colección Real que incluye artículos relacionados con Sudáfrica, en la Abadía de Westminster, donde hay desde 2018 un monumento a su protector Nelson Mandela.