La reina Camilla ha rendido un bonito homenaje a Isabel II a través de un especial emitido esta noche en la BBC, poco antes del minuto de silencio que se guardaba en honor a la difunta monarca a las 20:00h (21:00 hora española). La esposa de Carlos III ha elegido la víspera del funeral de Estado, que tendrá lugar este lunes en la Abadía de Westminster, para dedicar unas palabras a la que ha sido su suegra. Una intervención a modo de entrevista que, como no podía ser de otra forma, ha estado repleta de cariño y admiración. Además de contar una anécdota tan embarazosa como divertida, también habló del legado perdurable de la soberana y de otros recuerdos personales con ella.
Percance con los zapatos el día de su boda
La Reina consorte recordó cómo Isabel II la tranquilizó el día de su boda con el por entonces príncipe Carlos, el 9 de abril de 2005, después de sufrir un percance con sus zapatos. "Yo estaba bastante nerviosa y, por alguna razón desconocida, me puse un par de zapatos y uno tenía un tacón más alto que otro", ha explicado la mujer del actual monarca. "Estaba ya a mitad de camino rumbo a Windsor y pensé que no había nada que hacer... mientras ella lo vio y me dijo: "Mira, lo siento terriblemente", contaba la protagonista, remarcando el "gran sentido del humor" que tenía la monarca.
Vestida con un elegante vestido estampado, Camilla también ha querido hacer hincapié en cómo Isabel II labró su camino en una época en la que el mundo estaba dominado por hombres y no tenía referencias femeninas al mando de ningún cargo: "Debió de ser muy difícil para ella ser la única mujer. En ese momento no había primeras ministras ni presidentas. Ella era la única y tuvo que forjarse su propio papel. Ha formado parte de nuestras vidas desde siempre. Ahora tengo 75 años y la Reina está presente en casi todos mis recuerdos".
"Siempre recordaré esa sonrisa inolvidable"
Camilla quiso recordar igualmente la relación personal que tenía con su suegra. "Tenía esos maravillosos ojos azules que, cuando reía, iluminaban toda su cara. Siempre recordaré esa sonrisa inolvidable", explicaba la esposa de Carlos III visiblemente emocionada. Isabel II ayudó mucho a Camilla los últimos años e intervino en varias ocasiones para mostrarle su apoyo.
En su Jubileo de Platino, cuando se celebraron 70 años desde su ascenso al trono, Isabel II expresó su “sincero deseo” de que, una vez que Carlos se convirtiera en Rey, su esposa fuera nombrada como reina consorte. Desde el fallecimiento de la monarca el pasado 8 de septiembre, Camilla le ha rendido varios homenajes, como cuando viajó a Gales junto a su marido, el rey Carlos III, y decidió llevar un hermoso broche de puerros parecido al emblema nacional galés que le habría regalado la Reina.
La dolorosa lesión que la reina Camilla ha sufrido durante estos días