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Isabel II comenzó el domingo el que será su último 'viaje' a casa. Tras su fallecimiento en el Castillo de Balmoral, los restos mortales de la Reina han descansado esta noche en el Palacio de Holyroodhouse, en Edimburgo, y a lo largo del día de hoy el recorrido del féretro continuará hasta la Catedral de St Giles, donde permanecerá durante 24 horas para permitir que los británicos puedan despedirse y presentar sus respetos. Después, su ataúd volará a Londres el martes, acompañado por la princesa Ana de Inglaterra, antes de ser conducido al Palacio de Buckingham. Los ceremoniales se sucederán hasta que el próximo lunes, 19 de septiembre, se celebre el funeral de Estado en la Abadía de Westminster.
- El cambio en la línea de sucesión que convierte técnicamente a Archie y Lilibet en príncipes
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Será entonces cuando veamos a numerosos represetantes del mundo de la política y la sociedad británica, altos mandatarios, jefes de Estado y miembros de las Casas Reales europeas acompañando a los Windsor en su último adiós a la Reina. Sin embargo, ¿les veremos a todos? ¿habrá alguna ausencia destacada? No hay duda de que todavía hay muchas incógnitas por resolver al respecto.
- Los duques de Sussex se encuentran de nuevo con sus fantasmas
Una de las que está dando más que hablar es si el príncipe Harry llevará a sus hijos, Archie, de tres años, y Lilibet, de uno. Los duques de Sussex, que tienen fijada su residencia en Estados Unidos, confirmaron que van a permanecer en Londres hasta que el final del luto (que, según anunció el rey Carlos III, terminará siete días después del funeral del 19 de septiembre), sin embargo, sus dos hijos han permanecido todo este tiempo en su casa de California con la madre de Meghan, Doria Ragland. Archie y Lilibet ya llevan más de una semana separados de sus padres, por eso, según ha publicado la prensa británica, los Sussex están pensando si Doria y los niños deberían volar a Reino Unido.
© Getty ImagesTampoco se sabe cómo se sentarán los miembros de la Familia Real británica en la Abadía de Westminster. Como ya sucedió el pasado mes de junio durante las celebraciones del Jubileo de Platino de la Reina, todas las miradas estarán puestas en Guillermo y Harry. En la misa de Acción de Gracias que se celebró en la Catedral de San Pablo el 'reencuentro' entre los dos hermanos y sus respectivas mujeres brilló por ausencia: no hubo saludos ni miradas cruzadas... Los duques de Gales se sentaron a la derecha en primera fila entre Camilla y la princesa Ana, mientras que los Sussex ocuparon sus asientos a la izquierda y en segunda fila, detrás de los condes de Wessex y sus hijos.
© GtresonlineLa imagen de la que todo el mundo habla
Sin embargo, parece que ahora el nivel de tensión ha bajado un poco y la prensa británica cree que el funeral sería el momento idóneo para verles de nuevo juntos. Más aún después de la aparición sorpresa que hicieron los cuatro juntos el sábado por la tarde. Guillermo y Kate aparecieron en el Castillo de Windsor junto a los Sussex para para ver todas las ofrendas florales, mensajes y regalos que los británicos habían dejado a las puertas de la propiedad de Berkshire en homenaje a la Reina.
Se pudo ver a Meghan muy pendiente de Harry en todo momento, consolándole y dedicándole gestos muy cariñosos, ya que es consciente del cariño que sentenía por su abuela y de lo duro que fue para él no llegar a tiempo a Balmoral para despedirse. Esta reunión de 'los cuatro fantásticos', como se les llamaba popularmente hace años, ha sido la primera vez que les hemos visto en público desde el Día de la Commonwealth el 9 de marzo de 2020.
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