A sus cuatro años, Louis de Cambridge nos conquistó a todos en los actos del Jubileo de Platino de Isabel II. Agotó, en algunos momentos, la paciencia de su madre, pero dio muestras de ser un príncipe que se comporta como el niño que es: espontáneo, expresivo, curioso y también acusó el cansancio en el desfile que puso el broche de oro a las celebraciones por los 70 años en el trono de su bisabuela. Sus hermanos mayores, el príncipe George, de ocho años, y Charlotte, de siete, bordaron su papel de mini royals y ahora se ha sabido que el benjamín de los duques de Cambridge recibirá una educación diferente. Una decisión que aunque se produce después del Jubileo nada tiene que ver con la actuación del pequeño sino con la próxima mudanza que hará el príncipe Guillermo y su familia este mismo verano.
Los duques de Cambridge y sus tres hijos abandonarán el Palacio de Kensington, situado en el centro de Londres, para mudarse a Windsor y estar así más cerca de Isabel II, que hace unos meses estableció en el Castillo de esta localidad británica su residencia permanente tras toda una vida en el Palacio de Buckingham. Esto afectará ineludiblemente al colegio al que asistirán sus pequeños ya que lo más probable es que se matriculen en un centro escolar cerca de Adelaide Cottage, la propiedad que se baraja como su futuro hogar, tal y como informa Express.
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El príncipe Louis comenzó el año pasado su educación en Willcocks Nursey School en Kensington, la misma guardería a la que acudió su hermana Charlotte de pequeña.George de Cambridge pasó los primeros años de su vida entre Norfolk, Gales y Londres. Su hermana, entre la capital y Norfolk y el pequeño Louis ha vivido la mayor parte de su existencia en Londres, aunque ha pasado temporadas en Norfolk, donde sus padres tienen una casa de campo, Anmer Hall, donde se refugiaron durante el confinamiento provocado por el coronavirus y donde pasan periodos vacacionales así como fines de semana.
A diferencia de sus hermanos, el príncipe Louis no acudirá al colegio Thomas’s Battersea de Londres, sino que todo apunta a que empezará curso en la escuela Independent Preparatory Lambrook, cerca de Ascot. A pesar de la mudanza, el príncipe Guillermo y Kate Middleton seguirán manteniendo su base en Londres, en el Palacio de Kensingtonç, donde permanecerá su oficina de prensa. Con este cambio de vida, los Cambridge no solo estarán a tiro de piedra de la Reina sino que también estarán más cerca de los padres de la Duquesa que viven en Bucklebury, a 45 minutos en coche. Además, sus hijos podrán disfrutar de mayor libertad y un contacto pleno con la naturaleza, antes de que George empiece a asumir funciones institucionales.