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El profundo cariño y la enorme admiración que los Windsor siente por la matriarca de la Familia Real británica ha vuelto a quedar patente una vez más, esta vez en un ambiente único y excepcional como era el macroconcierto que se celebraba en los jardines del Palacio de Buckingham con motivo del Jubileo de Platino de Isabel II. Su hijo, Carlos de Inglaterra, y su nieto, el príncipe Guillermo, se subían al escenario este sábado por la noche para pronunciar sendos discursos en honor a la soberana. Palabras muy emotivas ensalzando la figura de la homenajeada por sus siete décadas en el trono, donde no faltaba tampoco un toque de humor que ponía el mismo duque de Cambridge durante su intervención. "A ninguna abuela le hace gracia que hablen de su edad", decía con una sonrisa en el rostro, "pero la mía lleva viviendo casi un siglo", añadía en alusión a los 96 años que la monarca cumplía el pasado abril.
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© Getty Images"Durante este largo período, la humanidad se ha beneficiado de desarrollos tecnológicos y avances científicos inimaginables", decía el príncipe Guillermo en referencia a cómo ha cambiado el planeta a lo largo de la existencia de la Reina. Unas palabras que iban enfocadas a la que es una de las grandes cruzadas de su familia, como es la lucha por el cuidado del medioambiente. Citaba entonces la célebre canción de Louis Armstrong, What a wonderful world, en relación a los esfuerzos que ha hecho Isabel II a lo largo de su vida por tener un mundo mejor. Recordaba en ese momento el discurso que hizo la soberana en la última cumbre climática COP26 de Glasgow (Escocia), para aseverar que "tengo la firme esperanza de que las palabras de mi abuela sean tan ciertas dentro de 70 años como lo son ahora, que como naciones nos unamos en una causa común", ha transmitido delante de un público entregado.
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© Getty ImagesEl príncipe de Gales, acompañado por su esposa Camilla de Cornualles, era el siguiente en hablar ante la multitud y contaba cómo su madre "ha reído y llorado" durante décadas junto a los ciudadanos de su país. "Te comprometiste a servir toda tu vida y lo sigues haciendo", enfatizaba interpelando directamente a su progenitora a la que se refería cariñosamente como "mi mamá". El heredero al trono británico le decía también que "has estado con nosotros en las épocas más difíciles, y ahora nos unes para celebrar los momentos de mayor orgullo, alegría y felicidad", expresaba. "Tu familia abarca ahora cuatro generaciones. Eres la Jefe de Estado y al mismo tiempo nuestra madre", señalaba con gran sentimiento, Por último, no podía faltar en boca de Carlos de Inglaterra un recuerdo especial a su padre, el difunto duque de Edimburgo, de quien ha dicho que si estuviera aquí "habría disfrutado del espectáculo para sumarse a nosotros de todo corazón" en homenaje a la que era su esposa, sentenciaba.
