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Su lucha para desestigmatizar la dislexia ha unido a una princesa británica y a unos príncipes suecos. Beatriz de York ha viajado junto a su marido, Edoardo Mapelli Mozzi, hasta Suecia donde se ha encontrado con la reina Silvia y con los príncipes Carlos Felipe y Sofia. Tanto la nieta de Isabel II como el hijo de los Reyes escandinavos y su esposa están muy comprometidos en la lucha por erradicar la discrimación y mejorar la calidad de vida de las personas que sufren este trastorno del aprendizaje, que ellos mismos sufrieron de niños.
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El matrimonio formado por la hija mayor del príncipe Andrés y el millonario de origen italiano ha viajado hasta Suecia con motivo de la Asamblea Mundial de la Dislexia que ha tenido lugar en el Palacio Real de Estocolmo. La Fundación de los príncipes Carlos Felipe y Sofia está muy involucrada en apoyar a las personas que la padecen y en cambiar la imagen que la sociedad tiene de ellos. De hecho el príncipe Carlos Felipe ha dicho en alguna ocasión que: “A todos los que tienen dislexia, quiero decirles que sé cómo se sienten. Somos muchos los que lo tenemos así que no estás solo”. En el año 2018, Carlos Felipe habló de las burlas que recibió a causa de la dislexia: "La gente fue muy dura conmigo, fue una sensación terrible". También su hermana, la princesa heredera Victoria, pasó por algo parecido: "Yo también sufrí en el colegio, donde oía cosas que me hacían daño. Era incapaz de leer o de escribir. La letras pegaban saltos.... ¡Y todos se reían de mí!".
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La entidad que lideran el príncipe Carlos Felipe y su esposa ha trabajado muy activamente con la organización británica Made by Dyslexia, organización de la que Beatriz de York es patrona desde el año 2013. Desde entonces, la Princesa se ha volcado con esta causa y ha permitido que se hicieran públicos detalles de sus problemas de alfabetización para resaltar las dificultades a las que enfrentan los disléxicos. Ella fue diagnosticada a la edad de siete años y gracias a un centro especializado logró graduarse en Historia.
Esta mini cumbre royal ha supuesto la primera vez que Edoardo participa en un acto sin otros miembros de la Familia Real británica, en una actividad de índole institucional y que es su debut en el extranjero con otra pareja de la realeza. Con anterioridad sí que ha participado en eventos con carácter eminentemente familiar de los Windsor, como el servicio de acción de gracias por la vida del duque de Edimburgo que tuvo lugar a finales del pasado marzo.
Para esa cita, la hija de Sarah Ferguson ha elegido un vestido largo en color negro con estamapado de flores y lunares, de estilo muy parecido al de Sofía de Suecia que ha optado por uno con estamapado en tonos malvas y verdes. La reina Silvia ha apostado por un vestido con chaqueta en fucsia satinado y pañuelo al cuello.
En tan solo unos días, la Casa Real sueca volverá a abrir los salones de Palacio para conmemorar el 76º cumpleaños de su monarca. Carlos Gustavo de Suecia tendrá este sábado una jornada cargada de actos que comenzarán a las 11:15 horas con una interpretación musical de la Marina y se dispararán 21 salvas en su honor. Más tarde saldrá al patio a saludar a sus conciudadanos y el público que lo desee podrá depositar flores en su honor.