Isabel II sigue con sus compromisos, que gracias a la tecnología puede realizar sin moverse del Castillo de Windsor, donde ha fijado su residencia. En una de sus últimas actividades públicas, la Reina ha hecho unas revelaciones sobre cómo le afectó el coronavirus, enfermedad de la que se contagió el pasado 20 de febrero. En una videollamada con los sanitarios y pacientes del Servicio Nacional de Salud británico (NHS, por sus siglas en inglés), la monarca ha reconocido que tener Covid la dejó “agotada”. Estas declaraciones se producen cuando queda poco más de semana para que cumpla 96 años, una edad que alcanzará el 21 de abril.
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“Le deja a una muy cansada y agotada ¿verdad?. Esta pandemia es horrorosa”, comentó la Reina sobre la enfermedad mientras hablaba con Asef Hussain, que estuvo ingresado por la Covid-19, y su esposa, Shamina. El pasado 20 de febrero, la Casa Real informó que la jefa del Estado había dado positivo en Windsor y que “tenía síntomas leves parecidos a los de un resfriado”. Aunque tuvo su audiencia semanal con el primer ministro, no apareció en las videollamadas programadas. Varias fuentes, según apunta el Daily Mail, dijeron que las cancelaciones se hicieron porque su voz sonaba ronca y no porque su estado de salud hubiera empeorado. Sin embargo, como le ha ocurrido a muchas personas que tienen las tres dosis de la vacuna, ha sufrido los efectos secundarios de la infección que incluyen un agotamiento extremo.
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Desde que el pasado otoño, cuando pasó una noche en el hospital, Isabel II ha realizado contadas actividades institucionales fuera de los muros de Palacio. Así, se perdió el día de la Commonwealth, que tuvo lugar el 14 de marzo, en el que sí participaron el príncipe de Gales, la duquesa de Cornualles y los duques de Cambridge. Antes, se vio obligada a suspender a última hora un viaje que tenía previsto a Irlanda del Norte. Tampoco pudo estar presente en la cumbre climática COP 26 de Glasgow, pero sí que se la vio en la Abadía de Westminsiter a finales del pasado marzo en el servicio de acción de gracias por la vida del duque de Edimburgo.
Precisamente hace solo unos días se daba a conocer que Isabel II no asistirá al tradicional servicio de Pascua y será sustituida por primera vez por el príncipe de Gales. El Royal Service se celebrará el 14 de abril, Jueves Santo, en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor. Será la quinta vez en sus 70 años de reinado que no participará en este acto religioso, que vuelve a celebrarse después de dos años cancelado por las restricciones sanitarias impuestas por el coronavirus.