La anécdota de Guillermo y Kate con una niña que les recibió en las Bahamas: '¡Son son muy altos!'

Tras una semana de intenso viaje por El Caribe, el príncipe Guillermo y Kate Middleton están a punto de llegar al final. Antes de regresar a casa junto a sus hijos, los Duques han hecho su última parada en las Bahamas, donde han sido recibidos por miembros del ejército. Su Airbus 'Voyager' de la Royal Air Force aterrizó en el Aeropuerto Internacional Lynden Pindling procedente de Jamaica, donde tuvieron una agenda repleta de actos y, además, fueron agasajados con una cena de gala en la que Kate deslumbró con su espectacular vestido verde esmeralda y joyas de la reina Isabel II.

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Al bajar del avión, los duques de Cambridge se encontraron con una sorpresa y es que a pie de pista les esperaba Aniah Moss, una niña de 8 años, que quiso darles la bienvenida regalándoles un precioso ramo de flores. Junto a ella protagonizaron las imágenes más entrañables, especialmente Kate, que se mostró muy cariñosa con la pequeña. 

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Muy educada, la niña (que tiene la misma edad que su hijo mayor, el príncipe George) entregó el ramo a la Duquesa y, acto seguido, hizo una reverencia. La ocasión lo merecía y Aniah quiso causarles buena impresión, por lo que se puso un precioso vestido en tonos rosas con un gran lazo, bailarinas, guantes blancos y un bonito collar. Además, recogió su cabello en un moño alto para completar este look de princesa con el que enamoró tanto a Guillermo como a Kate.

Las imágenes demuestran, una vez más, la cercanía que siempre muestra Kate. Le encantan los niños y, al ver la ilusión en el rostro de Aniah, no pudo evitar enternecerse. "Dijo que tenía un bonito vestido y que era muy guapa, además de darme las gracias por las flores", dijo Aniah según ha publicado la revista People. Además, al preguntarle qué le habían parecido los Duques, la pequeña no se lo pensó dos veces y respondió: "¡Son muy altos!".

Gracias a esta imagen que han publicado los Duques en su cuenta de Instagram, hemos podido ver la escena desde otro punto de vista. Kate estaba sonriente, pero la niña lo estaba aún más. Seguramente no podía creerse que estuviera conociendo a dos miembros de la realeza, como si fueran esos príncipes y princesas que solo aparecen en los cuentos de hadas.

"Fue sola, como una niña mayor", ha dicho orgullosa su madre, Kendenique Campbell-Moss, a la revista People, asegurando que compraron el vestido en Semana Santa el año pasado. "Cuando nos llamaron anoche para que fuera la niña que les entregara las flores, pensé que sería mejor sacarlo y asegurarme de que estuviera perfecto para este gran día", ha dicho.

El hijo del príncipe Carlos de Inglaterra pasó revista a las tropas de la Guardia Real a su llegada al Aeropuerto Internacional Lynden Pindling, que antes era conocido como Aeropuerto Internacional de Nassau.

Al comienzo de su sexto día de viaje por El Caribe, la Duquesa se mostró muy amable y atenta con algunas de las mujeres que formaban parte del comité de bienvenida. En las imágenes puede verse a Kate compartiendo risas y charlando con ellas mientras su marido saludaba a la Guardia Real.

Su siguiente parada fue una reunión con el primer ministro de las Bahamas, Philip Davis, que estuvo acompañado de su mujer, Ann-Marie Davis. Los cuatro se reunieron en su oficina en Nassau, donde estuvieron charlando durante unos minutos y se hicieron la 'foto oficial' que quedará para el recuerdo. La figura de la reina Isabel II estuvo todo el rato muy presente y, tal y como puede verse en la imagen, en la pantalla interactiva que tenían detrás, aparecía un mensaje en conmemoración del Jubileo de Platino de la soberana británica.

Kate estaba sensacional, con su precioso vestido aguamarina de Emilia Wickstead con el que quiso hacer un guiño a la bandera de las Bahamas, además de su melena recogida en una bonita coleta con un original coletero que simulaba un coral. Durante la reunión con el Primer Ministro, Philip dijo: "Llevamos esperando su llegada mucho tiempo. Se ha retrasado mucho, pero estamos encantados de que esté aquí", a lo que Guillermo respondió: "Sí, estamos muy emocionados de estar aquí". 

Durante su visita a las Bahamas, el duque y la duquesa de Cambridge participarán en la Regata de Vela que han organizado por el Jubileo de Platino. Además, se reunirán con algunos de los representantes de 'Coral Vita', la comunidad de científicos que lucha por proteger los arrecifes de coral en el mundo y que ganó el Premio Earthshot, el más prestigioso premio mundial de medio ambiente, que fue creado por el príncipe Guillermo y The Royal Foundation en 2020.