Deportista de élite, Zara Tindall (antes, Phillips) ha desarrollado una brillante carrera olímpica como amazona. Tras convertirse en madre de tres niños, el más pequeño hace diez meses, la hija de la princesa Ana de Inglaterra sigue vinculada al deporte ecuestre, por lo que el pasado fin de semana no se perdió las carreras en el hipódromo de Cheltenham, acompañada de su hija Mia, que acaba de cumplir ocho años.
La niña, que ocupa el puesto 22 en la línea de sucesión al trono y es la cuarta bisnieta de Isabel II, podría seguir los pasos de su madre. Pero también parece que le encanta el deporte que practica su padre, el exjugador de rugby Mike Tindall. Coronado como campeón del mundo, el marido de Zara llevó a la mayor de sus hijos a un partido benéfico celebrado en Gloucester en el que tomaba parte. Mia, que siguió el encuentro desde el banquillo, saltó entusiasmada al césped para celebrar con su padre el resultado del juego.