La noticia de la retirada de sus títulos militares, de los patrocinios reales y de su tratamiento de Alteza Real al príncipe Andrés ha pillado al propio interesado por sorpresa que según testigos presenciales se quedó pálido al recibirla. Además, tendrá que enfrentarse a su batalla judicial como un “ciudadano privado”, es decir sin el paraguas de la Casa Real. Retirado de la vida pública y sin títulos, el duque de York afronta un futuro incierto en el que ya se da por supuesto que no volverá a ejercer funciones de representación de la Corona y con la amenaza de un juicio por presunto abuso sexual. Una situación muy difícil que no solo le afecta él, sino a su exmujer, Sarah Ferguson, y a sus hijas, las princesas Beatriz y Eugenia. Hasta ahora las tres, que están muy unidas, han dado su apoyo al Príncipe, pero se encuentran, sin duda, ante la encrucijada más importante de sus vidas.
Sarah Ferguson, que a pesar de llevar muchos años separada Andrés de Inglaterra tiene con él una estupenda relación, ha quedado “devastada” después de enterarse que Isabel II le había quitado sus títulos, según publica OK! y ante el hecho de que la demanda de Virginia Giuffre, que acusa al Duque de haber tenido relaciones sexuales con ella cuando era menor, desemboque en un juicio. Sarah Ferguson “siempre se ha mostrado como una persona muy positiva, alegre y viendo el lado bueno de las cosas, pero esto ha sido un duro golpe”. Hasta el último momento creía que su exmarido podría sortear sus problemas judiciales. Ante este panorama, la Duquesa y sus hijas han hecho piña para estudiar qué hacer en un futuro ya que existe la posibilidad de de que tengan que declarar en el juicio, que si sigue según lo previsto se producirá a finales de este año y en el que pueden declarar 24 testigos entre los que se encontrarían Sarah Ferguson y Beatriz de York.
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Si es llamada a declarar en calidad de testigo en el juicio, el testimonio de la primogénita del príncipe Andrés tendría especial relevancia ya que podría ser una pieza clave en la defensa de su padre. En la demanda civil, Virginia Giuffre asegura que cuando ella tenía 17 años estuvo en un club nocturno de Londres con el duque de York antes de mantener relaciones íntimas no consentidas con ella en la mansión de Epstein del barrio londinense de Belgravia. Sin embargo, el tercer hijo de la monarca asegura que tiene coartada ya que en la fecha que indica Virgina “había llevado a Beatriz a una fiesta en una pizzería alrededor de las cuatro o cinco de la tarde. La Duquesa estaba fuera y teníamos una regla que decia que cuándo uno estaba fuera el otro se quedaba. Yo estaba de permiso de la Royal Navy así que estaba en casa”, dijo. Sobre este asunto, la princesa Beatriz ya dijo en diciembre de 2020 que “no recuerda en absoluto” la fiesta de cumpleaños en esa pizzería.
Respecto a Sarah Ferguson, la abogada que representa a Virgina, Sigrid McCawley, habría sugerido que declarara como testigo en el juicio dada su estrecha relación y a que siguen viviendo con el Príncipe en el Royal Lodge de Windsor. “Andrés es el mejor hombre que conozco y lo que hace por Gran Bretaña es increíble; nadie sabe cuánto trabaja por su país”, decía la también escritora. “Siempre decimos que somos la pareja divorciada más feliz del mundo. Somos un padre y una madre que nos apoyamos mutuamente y creemos que la familia lo es todo. Estoy orgullosa de lo que hemos hecho juntos para criar a nuestras hijas y mantenernos unidos”, añadió.
Sobre los títulos de las princesas Beatriz y Eugenia todo seguirá igual. Las dos tienen el tratamiento de altezas reales debido a la Carta de Patentes emitida hace más de un siglo por el rey Jorge V que estipulaba que todos los nietos de un monarca por vía masculina serían altezas reales y príncipes o princesas. El hecho de que su padre ya no pueda usar esta dignidad no afecta al título oficial de sus hijas ni su posición. Eso no quita para que el príncipe de Gales, heredero al trono, ya haya manifestado en anteriores ocasiones su deseo de tener una monarquía reducida cuando se convierta en Rey y dejar a la mínima expresión los miembros de la Familia Real con labores de representación. Las hermanas York tienen un número limitado de deberes monárquicos como participar en el desfile de Trooping the Color, algunas fiestas de jardín y puntuales recepciones. La pasada Navidad, Sarah Ferguson, Beatriz y Eugenia, acompañadas por sus maridos, Edoardo Mapelli Mozzi y Jack Brooksbank, respectivamente se desplazaron hasta la localidad suiza de Verbier, donde estuvieron disfrutando de las pistas de esquí, en un viaje en el que no hubo ni rastro del príncipe Andrés.