El próximo domingo 10 de octubre se celebra el día Día Mundial de la Salud Mental. Un problema que cada vez afecta, ocupa y preocupa a más gente. Hasta hace poco el que lo padecía se sentía estigmatizado y en la sociedad era tratado como un tema tabú. Por suerte, se ha avanzado mucho en ese camino y son muchos los personajes públicos que han contado su caso tratando de visibilizar la enfermedad. Uno de ellos ha sido James Middleton, hermano pequeño de la duquesa de Cambridge, quien ha verbalizado en varias ocasiones sus luchas con la salud mental, esta vez ha querido destacar uno de los factores más importantes y que más le ayudaron de cara a su recuperación de la depresión fue el apoyo de su familia, en especial de su hermana, la mujer del príncipe Guillermo.
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En una entrevista concedida al periódico The Telegraph, James confesó el gran apoyo que obtuvo por parte de toda su familia, que no solo le dieron su cariño y comprensión en esos momentos tan complicados, sino que fueron un paso más allá e incluso le acompañaron en persona a alguna de sus sesiones de terapia cognitivo-conductual, uno de los pilares fundamentales en su recuperación ha sido la duquesa de Cambridge, quien asistió con él personalmente en algunas ocasiones a su cita médica para, además de apoyarle, tratar de ponerse en su lugar y de entender cómo sentía. Se trata de un tipo de terapia psicológica, es decir, del habla, en la que mediante la intervención de un psicoterapeuta se ayuda a tomar más conciencia a los pacientes de los pensamientos negativos, de modo que logren ser más resolutivos en situaciones exigentes.
Al ser preguntado específicamente sobre si su hermana Kate Middleton estuvo de acuerdo en acompañarle, James lo confirmó. "Todos ellos y ha sido muy, muy imporgtante", afirmó. "No necesariamente al mismo tiempo, sino individualmente y, a veces, juntos. Y eso fue muy importante porque les ayudó a entenderme y a entender cómo funcionaba mi mente. Y creo que la forma en que la terapia me ayudó fue que no tenía a mi familia preguntándome: '¿Qué podemos hacer?' Lo único que pudieron hacer fue asistir a algunas de las sesiones de terapia para comenzar a comprender ". Al igual que la Duquesa, su hermana Pippa también asistió con él a terapia a alguna sesión.
Sincero y valiente, continuó revelando que, antes de asistir a terapia, estaba lidiando con pensamientos suicidas. Una vez que ingresó en un hospital psiquiátrico y le preguntaron sobre sus intenciones de acabar con su vida, explicó: "Recuerdo haber pensado: "Tendría que responder a esto con sinceridad, porque quiero que me ayuden”. Entonces me sinceré: “Bueno, en realidad, sí, pero no creo que lo haga nunca”. En mi informe decía que tenía pensamientos suicidas pero que no era una amenaza para mí ".
También admitió lo preocupado que estaba por tratar de disimular ante su familia lo que le pasaba. "Mi madre verá cuánto estoy comiendo y sabrá que algo anda mal", declaró. "Ella verá la forma en que la miro y sabrá que algo anda mal. Es lo mismo con toda mi familia. Somos muy cercanos y creo que eso puede ser ... un desafío”. Y proseguía explicando: “Recuerdo haber sentido que casi tenía para decirles: "Volveré, pero este es un proceso y me llevará tiempo recuperarme" ". Por suerte, gracias a casi un año de terapia cognitivo-conductual y al apoyo inquebrantable de su familia, James ha logrado superar la depresión en la que estaba sumido.