Su recuerdo y su figura siguen muy presentes. Diana de Gales se convirtió en un icono al que se sigue venerando en el Reino Unido, hoy 1 de julio más que nunca cuando se celebra el que habría sido su 60 cumpleaños. Sus hijos Guillermo y Harry le harán el mejor regalo mostrándose unidos, a pesar de los desencuentros que han marcado su relación estos últimos meses, en el homenaje que tiene como escenario los jardines del palacio de Kensington. En una íntima ceremonia los hermanos desvelarán la estatua que ya para siempre recordará a Lady Di en uno de sus lugares favoritos, pues fue en el palacio donde pasó sus primeros días como princesa y los años más felices de su vida
The Sunken Garden es el lugar que albergará la estatua, pues era uno de los rincones favoritos de la princesa. Con motivo de esta ocasión tan significativa la zona se ha rediseñado, un planteamiento realizado por Pip Morrison y llevado a cabo por el equipo de Gardens and Estatues, los jardineros que se ocupan del mantenimiento de los palacios reales, dirigido Graham Dillamore. Es una labor que se ha hecho con todo el cariño al recuerdo de Lady Di, un trabajo laborioso que ha llevado unas 1000 horas
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El nuevo diseño mantiene la estructura que tenía el jardín simplificando la disposición de las flores en los bordes y añadiendo más césped alrededor del estanque central con el objetivo de crear un espacio de calma y dar más protagonismo a la estatua
Entre las flores que se han escogido – se han plantado unas 4.000- están por supuesto las favoritas de la princesa, como los nomeolvides y un buen número de plantas que florecen en primavera y verano en una variedad de tonos pastel que combinan a la perfección. En la imagen Geranium 'Rozanne'
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Doscientas rosas de cinco variedades diferentes, incluidas la Ballerina y Blush Noisette; 100 nomeolvides; 300 tulipanes de tres variedades que incluyen White Triumphator y China Pink; más de 500 plantas de lavanda; más de 100 dalias; 50 sweet peas (guisantes de olor o arvejilla); y más de 400 metros de fino césped completan un conjunto armónico y colorido que trata de reflejar la personalidad de la princesa. En la imagen, la rosa Ballerina
Pip Morrison que se ha encargado de escoger los detalles de este precioso jardín, cuyas imágenes ha distribuido Kensington Palace, ha explicado lo que ha significado para él este proyecto. ‘Ha sido muy especial trabajar en este diseño pues el Sunken Garden era el lugar favorito de Diana de Gales. Hemos cuidado el proyecto para asegurarnos de que el nuevo diseño y esquema de plantas complementara la estatua, articulando un lugar sereno para que los visitantes que recorran Kensington recuerden a la princesa’. En la imagen Pellargonium 'White Boar' (geranio blanco)
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Graham Dillamore, responsable de Gardens and Estates, equipo que se encarga de los jardines en los distintos palacios, comentó: ‘Cuando residía en Kensington, la princesa de Gales admiraba con frecuencia las flores en Sunken Garden y siempre se paraba a hablar conmigo y con los otros jardineros que se ocupaban de él’. En la imagen, lavanda
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El Sunken Garden fue creado en 1908 por el rey Eduardo VII en un área de los jardines que estaba ocupada por cobertizos e invernaderos. El diseño del jardín se inspiró en el Pond Garden, un jardín de estilo danés del siglo XVII, situado en el Hampton Court Palace, en el condado de Surrey
Siempre ha sido una zona en la que se ha recordado a la princesa, un memorial que se llenó por ejemplo en 2017 de flores blancas para señalar el veinte aniversario de su trágica muerte en París. Se denominó entonces de manera temporal The White Garden, haciendo honor a este gesto. Fue además aquí, donde se siente tan presente a Diana de Gales, donde el príncipe Harry y Meghan Markle anunciaron su compromiso. La estatua de bronce está realizada por el artista Ian Rank-Broadley y se ubicará a un lado de uno de los caminos del jardín. En la imagen, uno de los jardineros trabajando en el nuevo diseño en mayo de 2021
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