El conmovedor detalle que marcó la primera cita pública de Isabel II en Londres tras la muerte de su marido

Día señalado para los Windsor. A sus 95 años, Isabel II ha salido por primera vez del castillo de Windsor tras la muerte de su marido y se ha trasladado hasta Londres, primero a Buckingham Palace y después montada en coche oficial hasta el Palacio de Westminster, donde ha asistido a la tradicional sesión de apertura del Parlamento británico. Se trata por tanto del primer acto público de la reina fuera de su residencia, desde que falleciera el duque de Edimburgo el pasado 9 de abril a los 99 años. A través del cristal del automóvil que la llevaba, hemos podido ver a la soberana con rostro sereno y tranquilo en su camino a la ceremonia que iba a presidir. En esas primeras imágenes, se atisbaba el abrigo y vestido azul grisáceo con motivos florales y sombrero a juego que ha elegido la reina para la ocasión

Extracto del libro ‘Mi marido y yo’, toda la verdad del matrimonio de Isabel II y Felipe de Edimburgo

En el evento institucional, ha habido un importante y conmovedor detalle que no ha pasado desapercibido para la gran mayoría y ha llamado poderosamente la atención: hablamos de la histórica retirada del trono que correspondía al príncipe Felipe y que siempre estuvo junto al de la soberana en la Cámara de los Lores durante décadas. Es más, ha tenido que pasar más de un siglo para que no viéramos el asiento del consorte, ya que se instaló en 1901 para la reina Alexandra, esposa del rey Eduardo VII, y ahí ha estado durante 120 años seguidos. Vemos por tanto la imagen que describe a la perfección cómo la reina ha ocupado sola la parte central, todo en el marco de un sobrio protocolo donde ella era la única a la que se le ha permitido no llevar mascarilla. El trono de la soberana es de caoba y oro, tallado con incrustaciones de cristal de roca y tapizado con terciopelo rojo y complejos bordados. Fue creado en 1847 por John Webb inspirándose en la silla de San Eduardo (o de la coronación) y es el ejemplo más antiguo que se conserva de un trono inglés, que fue usado por primera en 1308

Las cuatro amigas en las que se apoya Isabel II tras la muerte de su marido

Otra de las fotos del día nos muestra la corona de la reina, un tesoro trasladado con entidad propia en el interior de otro de los vehículos oficiales. Isabel II no ha hecho uso hoy de ninguna de las dos coronas, la de Estado y la Imperial, que suman miles de piedras preciosas. En esta ceremonia reducida por la pandemia, Isabel II ha desistido llevar el símbolo de reinado, presente sobre un cojín al lado. Tampoco se ha puesto el manto ceremonial ni se ha movido en la carroza dorada del Jubileo de Diamantes, vehículo con siglos de historia y curiosidades. Entre ellas, la cápsula colocada debajo de su asiento con un trozo de la Piedra del Destino de Escocia, sobre la que tradicionalmente se coronaba a las monarcas

Isabel II agradece el cariño y apoyo que ha recibido tras la muerte del duque de Edimburgo

Isabel II se ha sentado sin la compañía esta vez de su amado y añorado esposo, aunque tenía cerca en la sala a su hijo, Carlos de Inglaterra y a su nuera, la duquesa de Cornualles. La de este año ha sido la cuarta vez en la que el hijo de Isabel II acompaña a su madre en dicha ceremonia solemne, ya que también estuvo en diciembre del año 2019, en octubre de 2019 y en junio de 2017. Por su parte, Camilla acudía a la cita con un elegante vestido y abrigo en color crema, un sombrero a juego y uno de sus zapatos favoritos: los clásicos Chanel blancos con la punta oscura. Además, ha querido tener un gesto con la reina de Inglaterra añadiendo a su indumentaria un significativo broche. La joya en particular es de cristal de roca y perteneció a la Reina Madre, aunque posteriormente fue entregada a la esposa del príncipe Carlos por la propia Isabel II como un obsequio que la Duquesa ha lucido como una bonita muestra de su apoyo en un día emotivo para la monarca. La parte posterior del broche es transparente, por lo que consigue crear un efecto donde adquiere el color de la prenda sobre la que se dispone

Isabel II retoma sus obligaciones reales en Palacio tras la muerte de Felipe de Edimburgo

El príncipe Carlos de Inglaterra reemplazó por primera vez a su padre en la apertura del Parlamento británico en 2017, debido a una enfermedad del duque de Edimburgo y dos meses antes de que éste se retirara de sus funciones públicas. Cabe recordar que en 2020 se canceló el acto por el estallido de la pandemia. Como era de esperar, la sesión de este año ha estado marcada por las medidas anti-COVID y todos los asistentes se han sometido a un test previo que debía resultar negativo. En la imagen, les vemos desfilar camino a sus asientos, manteniendo siempre la distancia de seguridad obligatoria para los no convivientes

Isabel II agradece el cariño y apoyo que ha recibido tras la muerte del duque de Edimburgo

La monarca ha lucido para este día su conjunto de broches aguamarina dispuestos en la parte izquierda de su traje. Estas dos piezas formadas por preciosas piedras con formas ovaladas y redondas de color azul pálido han estado presentes en su joyero desde antes de acceder al trono británico en 1952. De hecho, tienen mucha relevancia para la monarca ya que fueron un regalo de su padre, el rey Jorge VI, en 1944 con motivo de su 18 cumpleaños cuando todavía ostentaba el título de Princesa. Pero no es la primera vez que hemos visto a la Reina lucir estas gemas, algo que hizo en mayo de 2020 con motivo de la celebración del Día de la Victoria en Europa al finalizar la Segunda Guerra Mundial

¿Quiénes han participado en la procesión funeraria del duque de Edimburgo?

El primer ministro británico, Boris Johnson, y la reina han pronunciado sendos discursos, enfocados ambos principalmente al compromiso de su labor en la mejora del país tras los devastadores efectos del virus. Isabel II aseveró que "la prioridad es llevar a cabo una recuperación nacional de la pandemia que haga al Reino Unido más fuerte, más sano y más próspero que antes, igualando las oportunidades en todos los lugares, respaldando los empleos, los negocios y el crecimiento económico, abordando a su vez el impacto del COVID en los servicios públicos". También instó a "proteger la salud de la nación, continuando con el programa de vacunación y proporcionando financiación adicional para respaldar al servicio público sanitario británico"

La carta que Isabel II dejó sobre el féretro de su marido