El príncipe Carlos recuerda los orígenes de su familia en su visita oficial de Grecia

Una visita muy esperada

El príncipe Carlos y su esposa, Camila de Cornualles, han viajado este miércoles 24 de marzo a Grecia, por petición del gobierno británico, para conmemorar el bicentenario del Día de la Independencia del país. La visita tiene una gran connotación emotiva ya que se trata del segundo viaje oficial al extranjero que realiza la pareja desde que empezó la pandemia mundial después de su viaje a Berlín el pasado mes de noviembre. Además, la Casa Real británica tiene una gran conexión con el país griego. El hijo de Isabel II solo ha pisado Grecia en dos ocasiones a título oficial, siendo la última visita junto a su esposa en 2018. 

Recibimiento por todo lo alto

Carlos y Camila llegaban al aeropuerto internacional de Atenas donde les esperaban una gran comitiva para darles la bienvenida. Junto al despliegue de una gran alfombra roja a los pies del avión oficial del Príncipe y la Duquesa, estaban presentes algunas autoridades del país como la embajadora de la reina Isabel II en Grecia, Kate Smith, así como el cuerpo oficial de policía y seguridad. En sus primeros minutos en suelo griego, hemos podido observar como la pareja realizaba los saludos respetando las medidas de seguridad con motivo de la pandemia, motivo por el cual, el príncipe de Gales juntaba sus manos a la altura de la boca con una leve inclinación de su cabeza.

Involucrados con el arte

Durante su primer día en Atenas, la pareja acudió a la ceremonia oficial de reapertura de la Galería Nacional de Grecia, que las autoridades del país quisieron que coincidiera con la visita real. La galería de arte ha estado durante más de 6 años bajo trabajos de reconstrucción, que finalizaron a principios de este año. A la llegada del acto, Carlos y Camila fueron recibidos por el primer ministro, Alexis Tsipras y su esposa, Mareva Grabowski-Mitsotaki. Seguidamente, se realizaron los discursos oficiales por parte de la ministra de Cultura y directora de la galería, Marina Lambraki-Plaka.

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En la visita por la galería, el príncipe Carlos y la duquesa Camila han caminado por los pasillos del edificio junto a un guía que les explicaba algunos de los cuadros más espectaculares e importantes que alberga. La colección que conforma este Museo fue legada al Estado por Alexandros Soutzos y la pareja real se mostró muy interesada, preguntando por algunos detalles de las pinturas que tuvieron oportunidad de observar.

El acto oficial marcado por el discurso del príncipe de Gales

La cena oficial, que tuvo lugar la noche del 24 de marzo en la Mansión Presidencial de Atenas, fue organizada por Katerina Sakellaropoulou, presidenta de la República y su pareja, Pavlos Kotsonis. Fue minutos antes del inicio del refrigerio cuando el príncipe Carlos pronunció un discurso conmovedor en el que quiso destacar su profunda conexión con el país, recordando el origen de sus familiares. "Grecia es la tierra de mi abuelo; y del nacimiento de mi padre, hace casi cien años, en el año del centenario de la independencia griega", declaraba el hijo de Isabel II recordando que su familia paterna fue exiliada del país. Además, añadía que Grecia "durante mucho tiempo ha ocupado el lugar más especial en mi corazón".

El objetivo sostenible de la Casa Real

También habló sobre la encomiable actuación de su abuela, princesa Alicia. "Durante los años oscuros de la ocupación nazi, albergó a una familia judía, un acto por el que en Israel se la cuenta como 'Justa entre las Naciones'". El príncipe Carlos ha querido poner en valor la democracia y la libertad que rigen ahora en el país e instó a que los lazos entre Grecia e Inglaterra siguieran estrechos, como en 1821 para poner en común un plan de sostenibilidad. 

La indumentaria que no ha pasado desapercibida

El príncipe Carlos y Camila de Cornualles acudían con un look muy especial: él llevaba un traje azul marino que combinaba con una corbata y un pañuelo azul cielo, a juego con el conjunto de Camila; una preciosa túnica de la misma tonalidad que presentaba un bordado floral dorado que combinaba con una sobrecamisa, un bolso de mano y una mascarilla. La indumentaria elegida por la Duquesa no ha pasado desapercibida y ha recibido muy buenas críticas por sus seguidores. Tras la cena oficial, los invitados pudieron disfrutar de una breve actuación musical en directo de la mano del violinista griego, Leonidas Kavakos.

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Un desfile marcado por la pandemia

Este jueves 25 de marzo la agenda oficial comenzaba para la pareja real con el desfile militar con motivo del Día de la Independencia de Grecia, que tuvo lugar en la Plaza Syntagma en pleno centro de la capital. Aunque es habitual ver dicho lugar abarrotado de gente ondeando la bandera del país, este año, con motivo de las restricciones por la pandemia, el Gobierno invitó a la población a quedarse en casa. El acto estuvo protagonizado por los guardias de Evzones, la unidad de infantería ligera de élite del ejército griego. 

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Estos guardias tienen fama por su característico uniforme: mallas blancas, falda de pliegues, un chaleco bordado sobre una camisa ancha, sombreros rojos con una larguísima borla y unos curiosos zapatos que culminan con una bola de pelo en la punta. La vestimenta es la original que utilizaron los griegos en su batalla contra los otomanos durante la Revolución de Grecia en 1821 hasta 1827. Uno de estos Evzones se dirigió al príncipe Carlos para entregarle la corona de Su Alteza Real que fue colocada, seguidamente, por el hijo de Isabel II, en el Monumento al Soldado Desconocido, tal y como marca la tradición. Finalmente, se pudo escuchar en la solemne plaza, el himno de Inglaterra.

El matrimonio ha compartido gestos de complicidad

A pesar del buen clima del que disfrutaba este jueves Atenas, la duquesa de Cornualles tuvo que taparse con una manta blanca mientras tenía lugar el desfile militar. El príncipe Carlos, en un cariñoso y cómplice gesto, ayudó a su esposa a colocársela bien. Ambos se unieron en matrimonio hace 15 años y en sus numerosas apariciones públicas conjuntas siempre han demostrado tener una gran conexión que no ha desaparecido con el paso del tiempo, al igual que ha sucedido en este viaje. La pareja sigue con su agenda oficial en Grecia hasta este viernes, cuando regresen de nuevo a Londres.