La pandemia provocada por el coronavirus ha impactado de manera importante en la familia de Sarah Ferguson y el príncipe Andrés. El exmatrimonio iba a ver casarse dentro de una semana a Beatriz de York, su hija mayor, con el millonario de origen italiano Edoardo Mapelli Mozzi, pero la crisis sanitaria ha dado, por el momento, al traste con sus planes. También para la princesa Eugenia, su hija pequeña, el COVID-19 ha sido un duro golpe: su suegro, el padre de Jack Broosbank, se contagió tras un viaje a Francia y se llegó a temer por su vida. Afortunadamente, ya se encuentra prácticamente recuperado. Muchos contratiempos a los que la duquesa de York se ha enfrentado con gran positivismo y su característica sonrisa y en la que se ha volcado por dar ayuda a los más vulnerables. A pesar de todo, Sarah también ha visto el lado bueno del encierro: pasar tiempo de calidad con una de sus hijas.
La princesa Eugenia y su marido están pasando la pandemia con los padres de ella en el Royal Lodge. “Durante este periodo de encierro realmente me ha encantado pasar más tiempo con Eugenia y Jack (…) Una vez que se casaron se fueron a vivir lejos, por eso no la veía tanto como me gustaría y ahora ha sido una alegría pasar tanto tiempo de calidad con ella”, ha dicho en el podcast de su amigo Darlton Harris. Como muchos ciudadanos, la Duquesa ha aprovechado para practicar sus dotes culinarias. “Por primera vez en treinta años, hemos preparado juntas un pastel de limón, algo fantástico”, añadió.
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A pesar de ver el lado bueno del encierro, Sarah Ferguson y toda la familia tienen una sensación agridulce por la cancelación de la boda de su primogénita. “Es triste que haya tenido que suspender el enlace que se iba a celebrar la semana que viene. Edo y Beatriz están viviendo con su suegra, que es encantadora y gran amiga mía. La echo de menos”. La hermana de Eugenia de York y su prometido se encuentran desde hace semanas en la casa de campo que Nikki Shae tiene cerca de la localidad inglesa de Chipping Norton, muy cerca de Oxford.
A pesar de trastocarse sus planes de boda, Beatriz de York se ha involucrado mucho en aportar su granito de arena dando su apoyo a las organizaciones de las que es patrona y colabora. También su madre y su hermana se han desvivido en estos tiempos convirtiéndose en dos de las caras más visibles del mundo de la realeza junto a los duques de Cambridge, Sofía de Wessex, los reyes Felipe y Letizia o Sofia de Suecia, entre otros.
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