El coronavirus ha obligado a transformar las rutinas de trabajo de millones de ciudadanos de todo el mundo. El teletrabajo se ha instaurado y también las Casas Reales han tomado buena nota de ello. La tecnología se ha convertido en la mejor herramienta para que Reyes y jefes de Estado puedan seguir trabajando en estos momentos de confinamiento. La monarquía británica no es ajena a las nuevas circunstancias y por eso, Isabel II ha decidido transformar su audiencia semanal con el primer ministro, Boris Johnson, en un encuentro vía telefónica.
La Reina se encuentra en el Castillo de Windsor, donde se ha reencontrado con su esposo, Felipe de Edimburgo. El matrimonio está pasando allí, lejos del bullicioso Londres, el tiempo de confinamiento debido a su avanzada edad. Los dos superan los 90 años y se encuentran en el grupo de riesgo de la pandemia. No obstante, la soberana, que siempre ha hecho gala de una gran responsabilidad para con sus deberes, ha querido departir con Boris Johnson, al que normalmente recibe en el Palacio de Buckingham. En esta ocasión y siguiendo las recomendaciones del distanciamiento social, la monarca ha usado el teléfono, en una imagen muy poco habitual.
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La llamada se ha producido desde uno de los salones del imponente castillo, en el que la Reina aparece vestida con una falda de cuadros, blusa y chaqueta de punto en tono azul. Sentada en una butaca, Isabel II ha usado para hablar con su interlocutor un teléfono en color claro. La estampa nos ha servido para ver una de las estancias privadas, profusamente adornada con varias figuras de perros, animales por los que Su Majestad tiene predilección.
Esta imagen se ha producido un día después de que Carlos de Inglaterra, heredero al trono de 71 años, diera positivo por COVID-19. Aunque fuentes de la Casa Real aseguran que no se sabe cómo pudo contagiarse debido al gran número de actos públicos que tiene, lo cierto es que el príncipe de Gales tuvo un encuentro hace quince días con Alberto de Mónaco, primer monarca contagiado. Dos días más tarde de su encuentro con el hijo de Raniero, el príncipe de Gales vio a la Reina en una breve visita. De momento la salud de madre e hijo es buena. Carlos de Inglaterra y su esposa, la duquesa de Cornualles, se encuentran pasando la cuarentena en su casa de Escocia. La Duquesa ha dado negativo.
El mensaje de la reina Isabel II tras abandonar el Palacio de Buckingham