Pañuelo en ristre y viaje en tren: Isabel II ya está de vacaciones de Navidd
La Reina ha llegado a la estación de ferrocarril de Norflok, donde pasará unos días en su residencia de Sandringham
Isabel II es mujer de costumbres que, año a año, se repiten. Una de las más entrañables es su ya mítico viaje en ferrocarril que realiza cada diciembre desde Londres hasta Norfolk, para empezar sus vacaciones de Navidad en su residencia de Sandringham. Ya es tradición ver a la soberana británica, como una viajera más, en la estación de este condado y también se ha convertido en doctrina el estilismo que elige para su viaje: pañuelo en la cabeza y abrigo de paño, una fórmula que la madre de Carlos de Inglaterra repite desde tiempos inmemoriales.
En esta ocasión Isabel II ha vestido con unos colores muy primaverales y ha elegido para su cita un vestido rosa, abrigo en el mismo tono y un pañuelo estampado a juego anudado sobre la cabeza, que ya se ha convertido en marca de la casa. Acompañada solo por algunos miembros de seguridad, la Reina llegaba así vestida este viernes a la estación de King’s Lynn de Norfolk, donde ha vuelto a protagonizar una de las imágenes más icónicas del año. Mientras ella llegaba a su destino, el duque de Edimburgo, de 98 años, era hospitalizado como "medida de precuación"
- Los duques de Cambridge y sus hijos felicitan la Navidad motorizados y de lo más veraniegos
La monarca británica siempre recorre en tren los 180 kilómetros que separan el Palacio de Buckingham (Londres) de su residencia de vacaciones y su pintoresca llegada marca el comienzo oficial de la Navidad. Generalmente la Reina se queda en su propiedad de Norfolk hasta después del 6 de enero.
En Sandringham, la Reina reúne cada Navidad a los miembros de la Familia Real, aunque este año habrá tres sonadas ausencias: la de los duques de Sussex y su hijo, Archie, que ya anunciaron que estas Fiestas las pasarían lejos de los Windsor y en su lugar pasarían unas semanas de descanso mediático en Los Ángeles junto a Doria Ragland, la madre de Meghan Markle.
Antes de la cena de Nochebuena y del servicio religioso del 25 de diciembre en la iglesia de Santa María Magdalena, Isabel II reunió a gran parte de su familia para un almuerzo familiar, en el que las nuevas generaciones robaron todo el protagonismo. A esta comida acudieron los duques de Cambridge con sus tres hijos, los príncipes George, Charlotte y Louis; el príncipe Andrés, que hace menos de un mes se retiraba de la vida pública tras verse salpicado por el caso Epstein; Beatriz de York, sin su prometido Edoardo Mapelli Mozzi con el que se casará en 2020; Eugenia de York y su marido, Jack Brooksbank; Mike y Zara Tindall, con sus hijas Mia y Lena; el príncipe Carlos y la duquesa de Cornualles; la princesa Ana y su marido, Sir Timothy Laurence; los condes de Wessex con su hijo James, vizconde de Severn, y su hija Lady Louise de Windsor, el hijo de los príncipes Michael de Kent, Lord Frederick Windsor, con su mujer Sophie, y sus hijas Maud, Elisabeth e Isabella Alexandra.