Los duques de Sussex ya han comenzado su gira por el sur de África, un viaje oficial muy esperado ya que es el primero para el pequeño Archie Harrison, al que han dejado con la niñera en esta intensa jornada. Además, el continente africano es como una segunda casa para el príncipe Harry ya que allí ha desarrollado un intenso trabajo en contra de las minas antipersonas, un compromiso heredado de su madre Diana de Gales. La familia llegó ayer a Ciudad del Cabo, y su primera parada ha sido la localidad de Nyanga, donde han sido recibida con un cariñoso comité de bienvenida. Los abrazos, los bailes y el ambiente festivo de la mañana han dejado paso a una tarde dedicada al recuerdo del Apartheid, una causa con la que los duques se encuentran especialmente comprometidos.
Primeras imágenes de Archie Harrison a su llegada a Sudáfrica
Así ha sido el cariñoso recibimiento de los duques en Sudáfrica
Meghan Markle, con un vestido camisero azul muy favorecedor, y el príncipe Harry, con un elegante traje beis, llegaban al Museo del Distrito 6, situado en una antigua zona residencial del centro de Ciudad del Cabo donde vivían esclavos, artesanos y comerciantes y donde durante más de cien años convivieron distintas culturas. Este centro está dedicado al sistema de segregación racial que regía en el país durante la segunda mitad del siglo XX. En 1966 el Gobierno declaró esta área como una zona solo de blancos y más de 60.000 vecinos fueron expulsados por la fuerza y reubicados en el municipio de Cape Flats.
Una multitud esperaba a los duques de Sussex en los alrededores del múseo y estallaba en júbilo en cuanto la pareja salió del coche. Entre los vítores y aplausos de los ciudadanos, Meghan y harry fueron recibidos por la directora Bonita Bennett, quien les guió en un recorrido por las exposiciones sobre la vida antes y después del apartheid. El hijo de Carlos de Inglaterra y su esposa se mostraron especialmente cercanos y amables con todos aquellos que se decidían a acercarse y saludarles. Entre ellos, ha destacado una mujer de 81 años, que según informa la revista People, ya estuvo presente cuando en 1947 Isabel II visitó la ciudad con sus padres y su hermana la princesa Margarita. La mujer se lanzó a los brazos de los duques y les preguntó dónde estaba Archie. "Está durmiendo", le contestó Harry asegurando que el pequeño estaba "agotado" tras el vuelo.
Para culminar un día lleno de emociones, los duques de Sussex han visitado el centro de acogida del distrito 6 donde de nuevo han sido saludados por un gran número de seguidores que les aclamaban como a verdaderas estrellas. Al llegar al centro un pequeño grupo de residentes les dio la bienvenida a su hogar. Se trata de un lugar que fue construido para proporcionar un lugar de reunión y recuerdo a los antiguos expulsados. Allí, han preparado una suculenta comida con los usuarios del centro para después degustarla. Meghan y Harry estaban entusiasmados probando los deliciosos dulces típicos de la zona y compartiendo sus bocados preferidos.
Tras los bailes, los abrazos y los discursos inspiradores que han caracterizado su primer día en Sudáfrica, el martes les espera un día cargado de compromisos con tintes más institucionales. Por la mañana visitarán la playa de Monwabisi, en Ciudad del Cabo, donde tendrá lugar un acto de la Commonwealth. Después el duque de Sussex acudirá a un encuentro con la unidad de la Marina. Tras visitar una mezquita, por la tarde pasearán por el colorido barrio malayo de Bo Kaap hasta poner la guinda al día con una recepción oficial.
Todo sobre el viaje a África de los duques de Sussex