Con una amplia sonrisa que deja claro lo simpático y juguetón que es. El príncipe George cumple seis años y para conmemorar esta fecha se han mostrado algunas instantáneas, que demuestran lo mucho que ha crecido y dan una pista sobre su carácter. Es la primera vez que estas fotos oficiales de cumpleaños las toma su madre, la duquesa Catherine, en lugar de un fotógrafo profesional, por lo que no es extraño que haya captado a la perfección la personalidad de su hijo. Se han mostrado tres imágenes que se hicieron en el hogar de la familia, Kensington Palace, y también durante las recientes vacaciones de las que disfrutaron. Una de las imágenes muestra al hijo de los Duques de Cambridge con una camiseta verde y pantalones a rayas azules y blancas, en un entorno natural, probablemente en Mustique, donde la familia pasa unos días de descanso.
Las otras dos fotografías demuestran la afición de George por el fútbol, pues en ellas lleva una camiseta blanca con el escudo del equipo inglés. En una de ellas, George mira directamente a la cámara, mientras que en la otra se le ve tirado en la hierba, también riéndose. En estas simpáticas fotos, se puede ver cómo al hijo de los Duques le faltan algunos dientes, algo propio de su edad. En los últimos meses se ha podido comprobar cómo ha ido cambiando físicamente el hijo del príncipe Guillermo, pues ha aparecido en diversas citas públicas como las bodas de los Duques de Sussex y la de la princesa Eugenia, en las que ha ejercido de paje.
La última ocasión en la que se le vio fue en el reciente partido de polo benéfico en el que participaron los príncipes Guillermo y Harry. George estuvo jugando a la pelota con su hermana Charlotte y también se le pudo ver charlando con su tía Meghan, que llevó al pequeño Archie, para que animara a su padre. Este año se pudo ver además a George hablando a la cámara por primera vez, durante la visita que hizo a un jardín diseñado por su madre, al que puso una puntuación de “veinte” cuando su padre le pidió que eligiera un número del uno al diez. Una muestra más de lo ocurrente y espontáneo que es.
La familia comerá la tarta por segundo año consecutivo en la isla de Mustique, un paraíso en el Caribe que han elegido para disfrutar de sus vacaciones estivales, que comenzaron hace una semana. Tras estos días relajantes y en los que seguro que no deja de jugar, retomará su rutina en el colegio Thomas's Battersea, en el que además este año comienza los estudios su hermana Charlotte.
Fútbol, ‘picnic’ y siesta en el maletero, las delicias de los pequeños Cambridge en el polo