Una icónica sudadera de Diana de Gales, vendida por 47.000 euros en una subasta
El comprador de la prenda, con la que la princesa solía ir a hacer deporte, permanece en el anonimato
A pesar de que falleció hace más de dos décadas, el nombre de Diana de Gales sigue estando muy presente cuando se habla de moda y tendencias. La madre de los príncipes Harry y Guillermo de Inglaterra no solo destacó siempre por su faceta solidaria sino también por su impecable estilo, que a día de hoy sigue siendo imitado. Es por eso que en cuanto ha salido a subasta una de las prendas más famosas de su armario ha recibido multitud de pujas. Son muchas las personas que querían hacerse con la sudadera que vestía habitualmente para hacer deporte pero finalmente se ha quedado con ella un comprador anónimo que ha pagado por ella 53.500 dólares (47.000 euros).
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Fue el pasado 10 de julio cuando esta prenda de la talla M, azul marino con una mujer pin-up y las palabras "Fly Atlantic" que le regaló a Lady Di el fundador de los gimnasios Virgin salió a la venta por un precio inicial de 5.000 dólares. En Boston se celebraba una puja cuyos beneficios están destinados a financiar los estudios de una niña de Malaui. Una causa para la cual aportó esta sudadera Jenni Rivett, quien fue la entrenadora personal de la exmujer de Carlos de Inglaterra.
"A la princesa le habría parecido bien si estuviera viva. Las causas solidarias por África le tocaban el corazón", aseguraba en New York Post esta mujer que la ayudó a mantenerse en forma durante siete años. Un tiempo que las ayudó a forjar una bonita amistad de la que Jenni tiene muchos recuerdos. De hecho, ha explicado que poco antes de fallecer en un trágico accidente, Diana la llamó para decirle que le había dejado algunas prendas de ropa entre las cuales se encontraba esta sudadera junta una nota en la que se podía leer: "Querida Jenni, con mucho amor, Diana".
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Además, Rivett ha desvelado el motivo por el cual Diana llegaba cada día al Chelsea Harbour Club con esta prenda puesta. "Le molestaba que quisieran fotografiarla cada vez que iba al gimnasio. Me dijo exactamente que había cosas más importantes en el mundo que el que ella fuera al gimnasio", recordaba. "Me comentó que su as en la manga era ponerse la misma sudadera en cada sesión de entrenamiento", aseguraba.
Esta profesional del deporte se solía reunir tres veces por semana con Diana de Gales, a la que recuerda como "una mujer disciplinada que trabajaba para mejorar su técnica y su postura". Ahora ha revelado, además, que las sesiones que preparaba para la madre del duque de Cambridge y el duque de Sussex combinaban ejercicios cardiovasculares con entrenamiento de fuerza.