¿A quién se parece el primer hijo de los duques de Sussex?
El bebé tiene unos rasgos muy redondeados que nos recuerdan a los de su madre, aunque como bien han dicho sus padres los niños cambian mucho y es difícil saber a quién se va a parecer
Era una de las imágenes más esperadas. ¡Por fin conocemos al bebé de los duques de Sussex! Este miércoles, 8 de mayo, el príncipe Harry y Meghan Markle han presentado al mundo a su primer hijo en Windsor, el mismo escenario en el que se casaron hace casi un año. El matrimonio ha posado con el recién nacido en el St George's Hall del Castillo de Windsor, debido a la lluvia y el mal tiempo que reinaba en la localidad. Muy emocionada, Meghan, que iba vestida de blanco, ha dicho: "Tengo a los dos mejores chicos del mundo. Soy muy feliz".
El bebé, que ha permanecido dormido en brazos de su padre durante la presentación a los medios, iba vestido de blanco y envuelto en una manta. Al verle nos hemos preguntado... ¿a quién se parece? Según los felices papás, "todavía es pronto para saberlo", eso sí, Meghan ha desvelado que es un niño "muy dulce y tranquilo". El recién nacido, que vino al mundo el pasado lunes y pesó al nacer 3 kilos y 300gramos, tiene unos rasgos muy redondeados que nos recuerdan a los de su madre, aunque como bien han dicho sus padres, los bebés cambian mucho y es difícil saber a quién se va a parecer.
"Todavía estamos intentando averiguarlo", ha dicho Meghan. "Todo el mundo dice que los niños cambian mucho durante las dos primeras semanas, realmente veremos lo que ocurre en el próximo mes porque van cambiando cada día, así que quién sabe", ha añadido Harry.
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¿Cómo eran Harry y Meghan de pequeños?
Aunque durante la presentación que el príncipe Carlos y Diana de Gales hicieron de Harry a su salida del hospital apenas se le vio al estar completamente tapado, semanas después pudimos comprobar que era un bebé rubio que ya mostraba tonos rojizos.
Meghan, por su parte, era una niña de mofletes regordetes, grandes ojos oscuros y pelo rizado, herencia de su ascendencia afroamericana. Hace solo unos días el Daily Mail publicaba unas imágenes nunca vistas de la mujer del Príncipe en sus primeras horas de vida y de cuando era pequeña. En estas fotografías, que ha compartido su tío con el periódico, se aprecia que era un bebé sonriente y despierto, con poco pelo oscuro y aún no tan rizado como se le vio más entrada en la infancia.
Aunque la genética es caprichosa, no han cesado en los últimos meses las especulaciones sobre qué rasgos podría tener el primer hijo de los Duques. Lo que está claro es que este bebé crecerá y cambiará mucho en el proceso, pero sin duda llegará a convertirse en un digno heredero de la personalidad abierta, amigable y generosa de sus padres.
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