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Los Duques de Sussex han puesto el punto final a esta intensa jornada de domingo en Marruecos asistiendo a una recepción ofrecida por Thomas Reilly, el embajador británico en el país. Hasta la Avenue SAR Sidi Mohammed de Rabat, lugar en el que se ubica la residencia oficial del embajador, se han trasladado el príncipe Harry y Meghan Markle con el objetivo de reunirse con jóvenes empresarias, mujeres influyente marroquíes y deportistas discapacitados, entre otras importantes personalidades de la sociedad de Marruecos.
Para la ocasión, los duques de Sussex han lucido sus mejores galas, tal y como hizo la reina Letizia hace solo unos días, cuando acudió a una cena de gala ofrecida por Mohamed VI y toda su familia y celebrada en el Palacio Real de Rabat. Si en ese momento, la esposa del rey Felipe optó por un espectacular vestido blanco cubierto con una túnica con bordados joya confeccionada en un tejido semitransparente de forma redondeada, rubricado por Felipe Varela, Meghan Markle no se ha quedado atrás y ha deslumbrado con su elección estilística, un diseño que resaltaba sus curvas premamá, pues la esposa del príncipe Harry se encuentra en la recta final de su embarazo. Concretamente, Meghan Markle ha optado por un vestido en tono champán que reinterpreta las túnicas típicas de la zona, con un original drapeado sobre el escote y mangas murciélago con brillantes bordados que se fusionan con la cola del diseño.
Los Duques de Sussex siguen los pasos de don Felipe y doña Letizia en Marruecos
Este acto pone el broche de oro a una jornada en la que no han faltado los guiños a la educación y al deporte. Los duques de Sussex han visitado una casa de huéspedes de una fundación, Educación para todos, que se dedica a ayudar a niñas y jóvenes de entornos rurales a acceder a la educación secundaria. También han podido conocer de primera mano la oferta educativa de la zona en un colegio de secundaria y han sido testigos de cómo un grupo de alumnos disputaba un partido de fútbol. El matrimonio ha llegado incluso a protagonizar algunas anécdotas y momentos curiosos a lo largo de este día.
Meghan Markle se atreve ¡con un tatuaje de henna!... y otras anécdotas de su primer día en Marruecos
La duquesa de Sussex recicla unos zapatos que estrenó antes de conocer al príncipe Harry
Este lunes, su último día en Marruecos, el príncipe Harry y Meghan Markle conocerán de primera mano el trabajo de la Real Federación Marroquí de Deportes Ecuestres y su programa de apoyo a niños con necesidades especiales. Más tarde podrán ser testigos de cómo se emplea la cocina tradicional marroquí para ayudar a los niños con discapacidades a desarrollar nuevas habilidades como las culinarias. Por último, el hijo de Carlos de Inglaterra y su esposa mantendrán un encuentro con jóvenes emprendedores marroquíes y podrán ver algunos ejemplos de la artesanía tradicional de la zona en los jardines andaluces de Rabat.
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