Aunque en un primer momento el comunicado oficial de Palacio ya confirmó que tras haber sido examinado por un médico, el duque de Edimburgo había salido ileso del aparatoso accidente de tráfico en el que se vio implicado en una carretera de Sandringham, una portavoz de Buckingham ha informado de que el viernes el marido de Isabel II fue trasladado al hospital para realizar un chequeo más en profundidad como medida de precaución. Una vez confirmado que, en efecto, el duque no sufrió ninguna herida de gravedad regresó a su residencia de Sandringham. Además, la misma portavoz ha asegurado que mantiene contacto de forma privada con los demás heridos en el accidente para interesarse por su evolución.
“Ha contactado en privado con los ocupantes del otro coche y se han intercambiado buenos deseos”, ha declarado, según recoge la edición británica de la Revista ¡HOLA!. El vehículo con el que colisionó su todoterreno Land Rover era un Kia en el que viajaban dos mujeres, de 45 y 28 años, que sufrieron heridas leves, y un bebé de nueve meses, que resultó ileso.
El suceso se produjo sobre las cuatro de la tarde (hora española) en una carretera de Sandringham y la Policía del condado inglés de Norfolk ya investiga lo sucedido. A pesar de estar implicado un miembro tan destacado de la realeza, el suceso está siendo tratado según los protocolos habituales, por lo que es posible que el duque tenga que ser interrogado en algún momento.
Tras el choque, Felipe de Edimburgo se acercó al otro vehículo implicado para preguntar si todos estaban bien. Cuando todo pasó, el Duque se mostró muy "conmocionado". Roy Warne, uno de los testigos que presenció todo, aseguró que el marido de la Reina dijo a los agentes que "había quedado deslumbrado por el sol" antes de producirse la colisión, tal y como recoge el Daily Mail. Debido al estado en el que quedó el vehículo, el consorte real tuvo que ser sacado del interior por el techo solar, de donde salió por su propio pie.
Pese a su avanzada edad, el Duque de Edimburgo goza de una relativa buena salud. En abril de 2018 fue operado de la cadera satisfactoriamente. Una visita por el hospital que no le impidió que un mes después acudiera al enlace de su nieto, el príncipe Harry con Meghan Markle. También estuvo entre los invitados de la boda de otra de sus nietas, Eugenia de York, que se celebró el 12 de octubre del año pasado. No obstante, aunque su presencia en actos familiares está casi siempre asegurada, en otoño de 2017 dijo adiós a sus compromisos públicos debido a su edad.