La primera gira oficial de los duques de Sussex en el extranjero está llegando a su fin. La guinda la pondrán este miércoles 31 de octubre en la ciudad de Rotorua, Nueva Zelanda. Hasta entonces Harry y Meghan continúan con un viaje casi épico de 16 días por 4 países y con 62 actos oficiales. En una de estas últimas citas el Príncipe ya ha incluido al “baby Sussex”, que vendrá al mundo en primavera, en su discurso y lo ha hecho de una forma adorable.
“Tanto yo, como mi esposa y nuestro little bump (literalmente significa nuestro pequeño bulto pero se usa para referirse a la barriguita de la embarazada) estamos agradecidos de estar aquí. Tramemos los mejores deseos de parte de mi abuela, la Reina, y de nuestra familia. Estamos muy agradecidos por su hospitalidad y por el trabajo que están haciendo para cuidar este hermoso lugar”, dijo el Príncipe a su llegada al Parque Nacional Abel Tasman de Nueva Zelanda.
Esta anécdota sucedió durante el segundo día de los Duques en el país, cuando visitaron la zona natural conocida por sus playas de arena dorada y su agua turquesa, un paisaje que en esta ocasión lución algo distinto, ya que la lluvia hizo acto de presencia.
Harry y Meghan se despidieron de Australia este domingo y abrieron así su agenda de cuatro días en Nueva Zelanda, el último de los países que van a visitar, comenzando por Wellington y compartiendo avión con los deportistas neozelandeses que habían participado en los Juegos Invictus. Tras la ceremonia oficial de bienvenida por parte de la Gobernadora General de Nueva Zelanda, Patsy Reddy, los duques de Sussex acudieron a la tradicional ceremonia ante la Tumba del Soldado Desconocido y al caer la noche acudieron a la recepción que en casa de la Gobernadora celebró el 125 aniversario del sufragio femenino en el país.