Una broma, una polémica y un halago… Así fue la noche de los duques de Sussex en Dublín
El príncipe Harry y Meghan estuvieron charlando con representantes del mundo de las artes, los deportes, el ejército y empresas sociales de todo el país en la residencia del Embajador británico durante su primer viaje al extranjero como marido y mujer
A pesar de ser la tercera aparición (y el tercer cambio de ropa) del día, la expectación seguía siendo máxima en la primera velada de los duques de Sussex en el extranjero. La pareja había aterrizado en Dublín unas horas antes para su primer viaje oficial a Irlanda, después de una mañana de actos oficiales en Londres por el centenario de la Royal Air Force, y tras la cálida bienvenida que les brindó el Primer Ministro de Irlanda, Leo Varadkar, llegó el momento de la “garden party” en la residencia del Embajador británico. Una broma, una polémica y un halago marcaron la noche.
El príncipe Harry y Meghan -que eligió un vestido de Emilia Wickstead, zapatos de Aquazzura, clutch de Givenchy y pendientes de su marca favorita, Maison Birks- llegaron a Glencairn, la residencia del Embajador británico, en Irlanda para encontrarse con representantes del mundo de las artes, los deportes, el ejército y empresas sociales de todo el país. Para la exactriz esta era la primera cita como representante de la Reina fuera del Reino Unido, una prueba más, sin embargo, Harry, curtido en mil “batallas” como esta rompió el hielo con una pincelada de su humor. “Es agradable saber que mi padre no les aburrió”, dijo Harry provocando las risas de los presentes haciendo referencia al reciente viaje del príncipe Carlos a Cork.
La polémica de la noche es la que recogen hoy todos los medios irlandeses, se desmenuza en cada informativo y fue provocada por un tweet de la senadora Catherine Noone, una de las invitadas a lo que la residencia del embajador. Tras el reciente referéndum en el que Irlanda ha dicho “sí” a reformar la ley del aborto, la senadora del partido que impulsó la reforma escribió en su cuenta de Twitter. “La Duquesa y yo tuvimos una conversación sobre el referéndum: lo siguió con interés y se alegró del resultado”.
Este tweet pronto comenzó a correr como la pólvora, ya que el abecé de los miembros de la realeza es no mostrar sus inclinaciones políticas. Acto seguido la política eliminó ese tweet, sin embargo la mayoría de medios irlandeses ya se habían guardado un pantallazo. Catherine Noone escribió entonces un segundo mensaje en el que se retractó: “Debo decir que ella parecía complacida, ella se interesó por el tema pero de forma moderada, nada político”.
La polémica por las palabras de la política irlandesa del partido Fine Gael, actualmente el partido gobernante, no cesó y ella decidió eliminar el segundo tweet. Finalmente publicó un inofensivo mensaje con una fotografía en la que se dejaba ver con los Duques. “Ha sido un placer conocer al príncipe Harry y a la duquesa de Sussex en la residencia del embajador británico”. Al ser preguntada por los motivos que le llevaron a eliminar esos tweets, la senadora lo aclaró todo: “Los borré porque de forma no intencionada eran engañosos, la Duquesa no fue en ningún sentido política”, tal y como recoge The Irish Sun.
El halago de la “fiesta de verano en el jardín”, como denominó la propia residencia del Embajador la cita de los Duques con los invitados, salió de boca de Meghan y hoy es un comentario que aplauden en Irlanda. La mujer de Harry dio muestras de haberse estudiado a conciencia todo lo que había sucedido en el país y al encontrarse con Vicky Phelan le animó: “Estas haciendo un buen trabajo, sigue así”.
Vicky Phelan era solo una de las 300 invitadas en la residencia el embajador pero Meghan conocía su historia personal: la de una madre de dos hijos que está luchando contra un cáncer cervical que le comunicaron con tres años de retraso. Desde el 2017, ella libra dos batallas una contra la enfermedad y la otra que le ha llevado al Tribunal Supremos, convirtiéndose en el abandera de una lucha según medios irlandeses afecta a cientos de mujeres que ahora siguen sus pasos.
“Meghan dijo que sabía quién era y que había seguido mi historia. Pensé: ‘Dios mío, es increíble’. Sé que la gente conoce mi historia pero no piensas que la realeza se preocupe por algo así… Me sorprendió, me quedé atónita y solo pude decir: ‘Gracias’. No lo podía creer. Ella dijo que estaba haciendo un gran trabajo y que continuara”, cuenta esta mujer de Limerick al irlandés Independent.