Mudanza en el Palacio de Buckingham
Los Condes de Wessex, el príncipe Andrés y la princesa Ana están siendo reubicados
Algunos miembros de la Familia Real británica abandonarán sus aposentos en el palacio de Buckingham. Los Condes de Wessex, el Duque de York y la princesa real Ana tendrán que desalojar la residencia oficial mientras se somete a una serie de reparaciones. El ala Este, cuya fachada alberga el balcón de fama mundial en el que la reina Isabel y el clan Windsor se asoman cada año, será el foco del trabajo de mantenimiento que se emprenderá a partir de abril de 2019. Pero fuentes de palacio insistieron en que los arreglos serían rutinarios y que no afectarían gravemente a los ocupantes reales.
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El príncipe Eduardo y su mujer, Sophie, tienen apartamentos privados allí, al igual que el príncipe Andrés, y todos, incluida la princesa real Ana, tienen oficinas privadas en palacio. Durante la restauración, su alojamiento y sus oficinas se trasladarán al cercano Palacio de St. James, donde la Princesa ya tiene habitaciones. Además de los miembros de la realeza, unos 120 miembros del personal se mudarán a oficinas renovadas y de planta abierta en el ático del ala oeste, conocido por los entendidos como the Footman's Floor, porque anteriormente se utilizaba como alojamiento para los sirvientes. Sin olvidar las 10.000 obras de arte pertenecientes a la Colección Real, que también se evacuarán para permitir que se realicen las reformas sin ningún peligro.
Los detalles de la primera fase del programa de renovación de 10 años se hicieron públicos, ya que el gasto anual de la reina Isabel se incrementó en un 13 por ciento. El presupuesto de la Corona británica (Sovereign Grant), los fondos de los contribuyentes recibidos para pagar los costos de nóminas, viajes y mantenimiento de las propiedades reales, aumentó de de los 41,9 millones de libras (los 47,3 millones de euros) a los 47,4 millones de libras (los 53,5 millones de euros) en comparación con el año anterior, el equivalente a 69 peniques (0,78 céntimos de euro) por cada hombre, mujer y niño en el Reino Unido en comparación con los 65 peniques (0,74 céntimos de euro) del último año financiero.
Pero la cifra no incluye los 30,4 millones de libras (los 34,3 millones de euros) adicionales percibidos de las ganancias de Crown State, el homólogo británico de Patrimonio Nacional, que se destinaron al programa de mejoras de 369 millones de libras (los 416 millones de euros) de una década de duración que fue aprobado por el Parlamento británico en 2016. El enorme costo está siendo cubierto por el aumento temporal del porcentaje de los beneficios de Crown State empleado para calcular la subida del presupuesto de Sovereign Grant del 15 al 25 por ciento.