Una semana de 'primeras veces' para el príncipe Harry y Meghan Markle
La pareja acudió al acto conmemorativo del Día de Anzac, una fecha muy importante en Australia y Nueva Zelanda
Desde que el príncipe Harry y Meghan Markle anunciaron su compromiso, ella renunció a su carrera como actriz para dedicarse por completo a sus funciones como futuro miembro de la Familia Real británica. Día tras día están demostrando por qué forman un tándem perfecto asistiendo a actos de diversa índole y Meghan está cumpliendo con su papel con nota. De hecho, durante las últimas semanas, la pareja está teniendo una agenda de lo más apretada, ya que también están ultimando los detalles de su boda, que se celebrará el próximo 19 de mayo en la capilla de San Jorge del Castillo de Windsor.
Después de acudir al evento Women's Empowerment de la Commonwealth, al servicio religioso con motivo del 25º aniversario del asesinato de Stephen Lawrence y al concierto que se celebró en el Royal Albert Hall por el 92º cumpleaños de la reina Isabel II, este miércoles, 25 de abril, Harry y Meghan asistieron al acto conmemorativo del Día de ANZAC, que honra a los soldados de las Fuerzas Armadas australianas y neozelandesas que "sirvieron y murieron en todas las guerras, conflictos y operaciones por el mantenimiento de la paz", tal y como explica el Palacio de Kensington en su cuenta oficial de Twitter.
Se trata de la primera vez que la prometida de Harry de Inglaterra acude a un servicio oficial de estas características y se aseguró de cumplir con la tradición de lucir una amapola roja en su solapa, en recuerdo a los caídos en la guerra. La pareja participó en la conmovedora ceremonia que recibe el nombre de The Dawn Service (Servicio al Amanecer) y que incluyó varias lecturas, además de un minuto de silencio, se escucharon los himnos nacionales y la correspondiente ofrenda de coronas de flores para rendir homenaje a los que ya no están. "Para todos los que hicieron el último sacrificio en pro de nuestra libertad. Gracias, Harry", escribió en una nota el Príncipe, que sirvió en Afganistán e Irak.
El Día de Anzac se conmemora en Londres desde 1916, cuando el rey Jorge V asistió a un servicio en la Abadía de Westminster con motivo del primer aniversario de la llamada Batalla de Galípoli o Batalla de los Dardanelos, que tuvo lugar durante la Primera Guerra Mundial.
Para el acto, que se celebró en el Arco de Wellington, en Hyde Park Corner, de madrugada cuando ya estaba amaneciendo, Meghan se decantó por un elegante abrigo gris abotonado, que combinó con un sombrero negro, además de clutch y zapatos de tacón a juego. Por su parte, Harry también llevaba la ampola roja en su solapa, además de sus condecoraciones militares.
Después, han participado en una ceremonia con el príncipe Guillermo: el Servicio de Conmemoración y Acción de Gracias, que se ha celebrado en la Abadía de Westminster. Se trata del tercer acto al que Harry y Meghan acuden desde el nacimiento de su sobrino. El tercer hijo de los Duques de Cambridge vino al mundo el lunes, 23 de abril, en el hospital St Mary en Paddington (Londres), el mismo en el que nacieron sus dos hermanos mayores, los príncipes George y Charlotte. Tan solo siete horas después, Guillermo y Catherine abandonaron el centro hospitalario con su bebé en brazos y derrochando alegría. El recién nacido, del que aún no han anunciado su nombre, es el tercer nieto del príncipe Carlos, el sexto bisnieto de Isabel II y ocupa el quinto puesto en la línea de sucesión al trono británico.