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Ni el amor tiene edad ni los vaqueros tampoco. Bien lo sabe la Duquesa de Cornualles, que se casó a los 58 años allá en 2005 con el amor de su vida, Carlos de Inglaterra, y que ahora a sus 70 se enfunda unos jeans como si tal cosa para gusto de sus seguidores, incluso de sus detractores, que se rinden en elogios: ¡Preciosa!, dice uno; ¡Estupenda a los 70!, dice otro; ¡Maravillosa!, dice alguien más... Y suma y sigue hasta los 216 comentarios de felicitaciones y alabanzas y los 7.070 me gusta que en cuestión de dos días ha logrado la fotografía en la cuenta oficial de la pareja real en Instagram. Porque a todos (o a la inmensa gran mayoría) convence la nueva Duquesa, sus nuevas maneras en el oficio de la representación y su nueva imagen casual.
El ataque de risa incontenible del príncipe Carlos y la Duquesa de Cornualles
No es frecuente ver a los miembros de la realeza vistiendo como gente corriente. Pero la Duquesa de Cornualles tenía su razón: quería celebrar su 70º cumpleaños compartiendo con sus admiradores la imagen más real de sí misma, que es menos real de la que trasciende en sus compromisos oficiales. Así, despojándose de los habituales trajes sastres de agenda y de los vestidos y tiaras de gala, se presenta relajada y sonriente en el jardín de su residencia en Clarence House para marcar la señalada ocasión.
“Gracias por todas las felicitaciones a la Duquesa. Con motivo de su cumpleaños, publicamos una segunda imagen, tomada en el jardín de Clarence House”, se anuncia con estas palabras la instantánea que tantos cumplidos ha recibido y en la que Camilla se proclama nueva reina del territorio vaquero. La esposa del príncipe Carlos completa este atuendo de éxito con una simple camisa blanca, una simple blazer azul marino y un simple cinturón a tono. El resultado, sin embargo, no puede ser más espectacular.
Un cumpleaños real sin retratos oficiales es como una tarta de cumpleaños sin velas. Así que la Duquesa de Cornualles señaló otro 17 de julio como la Corona manda y compartió las preciosas imágenes que había tomado de ella y de su marido el mundialmente conocido y reconocido fotógrafo Mario Testino. El autor ha declarado sentirse “honrado” de que la pareja real eligiera sus fotos para señalar una fecha tan importante. “Primero fotografié a la Duquesa después de su boda con el Príncipe para Vogue UK en 2006, y descubrí una persona amable y hermosa con un maravilloso sentido del humor. Este último trabajo para celebrar el 70º cumpleaños de Su Alteza Real es un verdadero honor”.
Un portavoz de la pareja explicó al respecto que la Duquesa había sido fotografiada con el príncipe Carlos y en solitario en su residencia en Clarence House por el fotógrafo de la realeza Mario Testino, que los había retratado ya antes en unas cuantas ocasiones. Las instantáneas son dos de las varias que se tomaron ese día. “No se hicieron pensando de antemano que serían retratos oficiales de cumpleaños, pero a Sus Altezas Reales les gustaron tanto que decidieron que sería bueno compartirlas para marcar el día”. No cabe duda: la mejor decisión.
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