Donde hay una causa, ahí está Meghan Markle. Ahora la novia de Harry de Inglaterra recorre los mismos pasos humanitarios de Diana de Gales durante un viaje a la India como embajadora de World Vision, la organización de ayuda a la infancia con la que colaboró la Princesa del pueblo. La estrella de Suites quiere ser estrella que guíe el cambio por lo que, a pesar de que a principios de enero se había informado de que la actriz cancelaba su visita por razones de seguridad, ha seguido adelante con su misión en Nueva Delhi para la promoción de la salud y la higiene en las niñas y mujeres de los barrios más pobres de la capital.
El hecho de que la princesa Diana fuera en su día embajadora de World Vision o de que visitara en 1992 los barrios más marginados de la India en compañía de Madre Teresa de Calcuta (hoy Santa) hace aún más emotivo un viaje que Meghan había estado planeando al milímetro durante los últimos ocho largos meses, involucrándose de principio a fin en su organización, en su programación y en su realización: “Ella no quería recibir las notas elaboradas por alguien y aparecer sólo cuando se la requiriese. Estas cuestiones son de verdadera importancia e interés para Meghan y las lleva a cabo de manera apasionada”, declaró una fuente a Us Weekly.
La estancia de la novia del príncipe Harry ha coincidido con el movimiento Rise Up de World Vision! Daughters of India, que tiene como objetivo aumentar la conciencia sobre la discriminación de género, incluyendo el problema de 63 millones de adolescentes que no tienen acceso a las instalaciones sanitarias adecuadas. La agenda de Meghan en la India ha prestado especial atención a la promoción de la higiene entregando tampones a las jóvenes mujeres de la India más desfavorecida con sus manos tatuadas de henna como las suyas. También ha asistido a algunas reuniones de alto nivel con diversas organizaciones no gubernamentales, incluida una audiencia con Shamina Shafiq, ex miembro de la Comisión Nacional de la India para las mujeres.
Entre los campos de refugiados y las alfombras rojas
Los gastos de traslado y de seguridad de la novia del Príncipe corren a cuenta de la organización. Antes de la India, Meghan visitó Afganistán y Ruanda como parte de su labor humanitaria con World Vision. Su ternura con los niños en aquellas visitas trae ahora a la memoria la entrega de la Princesa del pueblo, que hizo de la ayuda a los desfavorecidos su causa y cambió el mundo. También el trabajo humanitario es esencial para Meghan: “Mi vida discurre entre los campos de refugiados y las alfombras rojas. Elijo ambos escenarios que pueden coexistir, y de hecho coexisten. Y para mí, deben hacerlo. Jamás quise ser una mujer florero, sino una mujer trabajadora. Y este tipo de trabajo alimenta mi alma y alimenta mi propósito”.