¡Batidos y marionetas! Los Duques de Cambridge disfrutan como niños de su turismo 'improvisado'

En el marco de su viaje a Cornualles, tuvieron que aplazar por unas horas su visita a las islas Sorlingas debido al mal tiempo, pero encontraron un 'plan B' muy divertido

por hola.com

Se acabó la breve escapada de los Duques de Cambridge al Ducado de Cornualles. El príncipe Guillermo y su esposa han puesto fin a un viaje de dos días que ha estado marcado por el mal tiempo. Tanto es así que su visita a las islas Sorlingas, programada para este viernes, tuvo que aplazarse unas horas, aunque no tardaron en encontrar algo que hacer hasta entonces.

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"La visita del Duque y la Duquesa a las islas Sorlingas se ha retrasado, debido a las condiciones meteorológicas adversas que están afectando a los desplazamientos", informaba el Palacio de Kensington a través de su cuenta oficial en Twitter. Anunciaban, además, que en su lugar dedicarían la mañana a visitar el Proyecto Edén, un impresionante complejo medioambiental situado en Cornualles.

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Aunque no esperaban su visita, recibieron a Guillermo y Catherine con los brazos abiertos. Y parece que ellos lo pasaron en grande recorriendo las instalaciones. Entre otras cosas, descubrieron el Rainforest Biome, la mayor selva tropical cubierta del mundo, probaron algunos deliciosos batidos frutales y rieron a carcajadas con una marioneta en forma de bebé dinosaurio.  

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Una vez más, el estilismo de la Duquesa de Catherine fue un absoluto acierto. La esposa del príncipe Guillermo demostró cómo se puede ir impecable con unos pantalones de apenas 21 libras (25 euros), el precio por el que se puede conseguir en rebajas esta prenda de estilo étnico de la firma Gap. Lo combinó con una parte superior muy sencilla, de color blanco, un blazer azul y sandalias de cuña. 

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Afortunadamente, por la tarde el clima concedió un respiro y los Duques de Cambridge pudieron visitar las islas Sorlingas, tal y como estaba previsto. En los Jardines de la Abadía de Tresco o en el Centro Comunitario de St. Martin, pusieron el broche de oro a su viaje.