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La Duquesa de Cambridge dio un toque distinto a su aparición oficial del servicio interreligioso de la Commonwealth con un sombrero de ala ancha. La primera impresión fue que hacía un guiño a Máxima de Holanda aumentando la talla de sus habituales sombreritos, pero no. Luego, tras la pesquisa periodística rutinaria sobre el atuendo de turno, trascendió que la Duquesa había vuelto a recurrir a su modelo de siempre, Diana de Gales, para coronar el acto con una creación de John Boyd, el sombrerero de la Princesa del pueblo.
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Nadie mejor que la princesa Diana para guiar sus pasos (y sus estilismos), por lo que se sumó a la reina Isabel II y a los príncipes Guillermo y Harry para celebrar la señalada ocasión luciendo un abrigo gris de la firma Erdem y tocado de fieltro gris del que fuera sombrerero de cabecera de la Princesa. El diseñador escocés comenzó a trabajar para la Familia Real británica en 1967, si bien su fama se disparó en los años 80, cuando Diana de Gales entró a formar parte de la familia Windsor tras su matrimonio con el príncipe Carlos en 1981 y comenzó a vestir sus creaciones, y a ponerse el mundo por sombrero.
El recuerdo de la princesa Diana no sólo está más presente que nunca en los grandes acontecimientos de la vida de los Cambridge, sino también en la agenda oficial de la duquesa Catherine. Ya en el mismo compromiso, queriendo hacer partícipe a la princesa Diana de su felicidad, el príncipe Guillermo puso el emblemático anillo de compromiso de su madre en el anular de su amada y futura esposa, entonces conocida como Kate Middleton, que vistió como aquella, de azul, para los históricos retratos oficiales y la tradicional rueda de prensa.
Otro de los momentos memorables en los que la Duquesa volvió a inspirarse en la Princesa fue durante la presentación del príncipe George a las pocas horas de su nacimiento. La imagen se repetía tres décadas después al abandonar la maternidad St. Mary de Paddington: la Duquesa de Cambridge se enfundó un vestido azul claro con lunares blancos muy similar al vestido verde con topos más pequeños con el que la princesa Diana salió del mismo hospital con su pequeño en brazos tras haber dado a luz al príncipe Guillermo.
Abundan también los guiños en actos, viajes y galas oficiales. La duquesa Catherine estrenó por ejemplo el pasado mes de diciembre su tiara, conocida como la diadema Cambridge Lover´s Knot, que no era otra que la favorita de la Princesa de Gales, para la anual recepción diplomática organizada por la reina Isabel.
Diana de Gales y Catherine de Cambridge: El arte de llevar sombrero
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