Al siempre alegre príncipe Harry ayer se le torció el gesto. Se vio superado por la emoción durante su encuentro en el palacio Buckingham con algunos veteranos de guerra, y más concretamente al conocer a la soldado Kristie Ennis, que le hizo entrega de la chapa de un compañero fallecido en combate. Un detalle que dejó al Príncipe al borde de las lágrimas.
El príncipe Harry le agradeció el gesto insistiéndole en que no podía aceptarlo. La joven le aseguró que a su compañero, que falleció en 2012 en acto de servicio, nada le honraría más que su identificación la tuviera un miembro de la Familia Real británica, y especialmente él, que ha estado en el Ejército, que ha vivido un conflicto bélico en primera línea de fuego y que, además, ha hecho tanto por los heridos de guerra. Ante la firmeza de Kristie,no pudo rehusar la insignia del cabo Baune y se estrecharon en un abrazo.
Para Kristie era crucial asistir a la cita real. Tanto como para posponer la operación a la que debía someterse ese mismo día como consecuencia de un accidente de helicóptero. Le iban a amputar una de sus piernas en una intervención que estaba fijada originalmente en la misma fecha que su encuentro con el príncipe Harry, pero pidió que la retrasaran para poder asistir en Palacio a la reunión de los veteranos que llevan andando 72 días para recaudar fondos a favor de los heridos en combate.
Y, en una nueva demostración de su alto sentido del deber, transmitir lo importante que es el apoyo real y, por encima de todo, dar la placa de Baune al Príncipe. A este Príncipe que tan bien les comprende, que estaría dispuesto a compartir su suerte y que, por eso, nunca los abandonará. La herencia de la princesa Diana es innegable en el príncipe Harry.
)
)
)
)
)
)
)
)
)
)
