Ser príncipe y papá a tiempo completo no es fácil, menos con dos hijos pequeños que requieren de toda la atención y cuidados de sus padres. Guillermo de Inglaterra duerme poco, pues la princesa Charlotte nunca duerme y el príncipe George no para de moverse, según ha revelado a las jugadoras de la selección inglesa de fútbol.
El Duque de Cambridge, presidente de la Asociación de Fútbol, visitó al equipo capitaneado por Steph Houghton en Staffordshire una semana antes de su viaje a Canadá para participar en la Copa del Mundo de fútbol femenino. La selección le regaló al príncipe una diminuta camiseta blanca con el nombre ‘Charlotte’ y el número 1 en la espalda. El hijo del Heredero posó con la pieza en las manos y una gran sonrisa en el rostro.
La capitana Houghton declaró a los medios tras su encuentro con el nieto de la reina Isabel que éste les había dicho que la princesa Charlotte les había mantenido despiertos unas cuantas noches en las últimas tres semanas. "De lo único que hablaban era sobre cómo están la princesa Charlotte y el príncipe George, y de si le dejan dormir por las noches", declaró Houghton. "Obviamente dice que está disfrutando mucho la paternidad, pero reconoció que la princesa Charlotte les mantiene despiertos por las noches y quizá por eso sus ojos se ven un poco cansados”, añadió la capitana.
Las futbolistas le preguntaron si el príncipe George, de 22 meses, comenzará a jugar pronto al fútbol, a lo que el Duque de Cambridge respondió: "¡Ojalá! Porque nunca deja de moverse." Jill Scott, otra de las jugadoras de la selección, añadió: "Dijo que pasó un par de noches sin dormir, con el bebé despierto y George corriendo por ahí. Eso refleja que hace una vida normal más allá de su deber como representante de la realeza."
A pesar de que su permiso de paternidad sigue vigente, el príncipe Guillermo ha continuado con sus actividades oficiales. El martes, dejó brevemente a su esposa con su hija para asistir a una reunión del movimiento United for Wildfire en Suiza, una fundación que creó con la Duquesa de Cambridge y su hermano, el príncipe Harry. Posteriormente estuvo presente en el castillo de Windsor, donde estuvo hablando con la estrella de reggae Brinsley Forde y le dijo que su hija "se encuentra bien".
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