Los Duques de Cambridge, eco de Carlos y Diana de Gales en Uluru

Los Duques de Cambridge han visto por sí mismos la majestuosidad de Uluru al atardecer. Unos minutos antes de las seis de la tarde de este martes, la pareja real se encontraba preparada para posar ante las mejores vistas del lugar, a donde la duquesa Catherine llegó en sus altos zapatos de plataforma. La escena evocaba la que los padres del Duque, Carlos y Diana de Gales, protagonizaron hace más de treinta años durante su gira australiana de 1983 en el emblemático paraje -anteriormente conocido como Ayers Rock- en el corazón del Outback australiano. Uluru es uno de los lugares más románticos en Australia y una parada casi obligada en la gira oficial de la pareja, que celebrará su tercer aniversario de boda la próxima semana. La Duquesa, que vistió para la ocasión un reciclado vestido de Hobbs y sensatamente sus citadas cuñas, conversaba animadamente con el príncipe Guillermo, que como su padre se decantó por la gama de los tostados y lució una camisa y unos chinos en diferentes tonos de beis, mientras disimuladamente espantaba una mosca de la cara.

Resultaba difícil no comparar las modernas instantáneas de la pareja con las icónicas imágenes de los Príncipes de Gales de hace tres décadas prácticamente en el mismo sitio. También el príncipe Guillermo, con la misma edad que ahora su hijo, les acompañaba de gira, aunque no a Uluru. Tampoco el príncipe George se ha unido a sus padres en esta visita y se ha quedado con su niñera en la capital. Los Duques pasarán la noche del martes bajo las estrellas en el hotel de lujo Longtitude 131º de Uluru, donde tendrán la oportunidad de ver también salir el sol. Además de los príncipes Carlos y Diana, otras dos parejas reales han visitado el lugar: los reyes Carlos Gustavo y Silvia de Suecia en 2005 y los entonces príncipes Guillermo y Máxima de Holanda en 2006.