Con tacones y falda tubo... La Duquesa de Cambridge demuestra cómo se juega al críquet
El apretado programa de los Duques de Cambridge en Nueva Zelanda incluía hoy un partido de críquet. La duquesa Catherine demostró buenos reflejos y mucho tino durante su visita a Christchurch para promocionar la Copa Mundial de Críquet, que se celebrará allí mismo en 2015. Aún con altos tacones y un ajustado y femenino traje rojo, la sonriente Duquesa se hizo con un bate amarillo de críquet para enfrentarse a su esposo, el príncipe Guillermo.
La Duquesa de Cambridge caminaba con mucha cautela por el campo debido a su calzado, pero jugó gallardamente y evitó un golpe en la cabeza debido a un lanzamiento demasiado enérgico de su marido. Era tal vez la oportunidad del príncipe Guillermo de arrebatarle una victoria después de su derrota del viernes en la carrera de yates en Auckland. El Príncipe se mostró excesivamente apasionado al golpear y su primera bola le pasó silbando en el oído a su esposa, que le respondió con un reproche con el dedo y una sonrisa. De las cuatro bolas a las que se enfrentó, la duquesa Catherine dio a dos, para deleite de la multitud de espectadores.
La pareja real se reunió a continuación con un grupo de jóvenes jugadores que les habían estado observando practicar antes de ellos entrar en acción: "Ni verás la bola", bromeó el príncipe Guillermo cuando hizo de receptor. Pero Jamie Elley, de 11 años, que se enfrentó a dos bolas del Duque, se quedó menos que impresionado. "Él estaba un poco oxidado, pero el segundo lanzamiento fue bueno". La Duquesa recibió los consejos de la exjugadora Debbie Hockley: “Le dije que no se preocupara de la técnica, sólo de golpearla. Yo no podría haber jugado con tacones”.
Antes de su partido de críquet, los Duques de Cambridge habían disfrutaron de una cálida acogida de la gente de la ciudad y de un fructífero encuentro con cinco madres de gemelos y sus diez bebés. Nicola Burton, madre de Lucas y Oliver, de 21 meses de edad, dijo de su encuentro real: “El príncipe Guillermo parecía sólo un poco abrumado por la cantidad de bebés”. También comentó que la Duquesa era muy simpática y cercana, y que se agachó para jugar con los niños a su altura. La mamá reveló también que alguien bromeó con la posibilidad de que la próxima vez pudieran tener gemelos: “Ellos sólo rieron. Dijeron que todos los niños parecían ser muy tranquilos y que ellos no podían imaginarse con dos”.