La agenda institucional de Amalia de Países Bajos no deja de crecer y de estar marcada por muchas primeras veces. La heredera al trono debuta este martes en el Día del Príncipe, uno de los actos institucionales más importantes del año para la Familia Real neerlandesa. Acompañada de sus padres, los reyes Guillermo y Máxima, y de sus tíos, los príncipes Contantijn y Laurentin, la Princesa de Orange ha participado en este importante día, vestida de gala y en carroza de cristal, después de que este acto haya recuperado su esplendor tras la pandemia.
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Para esta cita tan solemne, Amalia ha elegido un vestido de gasa en color verde botella con manga tipo murciélago, un tocado en color claro, cartera de mano de predería y guantes y zapatos en color natural. Además, la nieta de la princesa Beatriz ha llevado unas llamativas joyas. Se tratan de las esmeraldas de la reina Guillermina que datan de 1899 y que fueron un regalo de la reina Emma a su hija. Integraban la dote de la princesa Guillermina de Prusia por su boda con el príncipe Guillermo en el siglo XVIII. El collar, de diamantes y esmerladas tiene en el centro una espectacular piedra preciosa cuadrada ribeteada de brillantes. Es muy habitual que la reina Máxima las lleve acompañada de la tiara de este fabuloso conjunto.
La Princesa ha llevado la cinta y la gran cruz de la Orden del León de los Pasíses Bajos. Por su parte, la reina Máxima se ha decantado por el siempre elegante color gris con un total look compuesto por vestido largo con cuello tipo smoking y un chal y resto de complementos al tono, al igual que su tocado. Ha portado la gran cruz de la Orden del León
Como es tradición, el tercer martes de septiembre, los Reyes, y en esta ocasión su hija mayor, viajan en el Carruaje de Cristal al Teatro Real, donde el Rey pronuncia el discurso al trono con el que el monarca da por inaugurado el año parlamentario y da a conocer el programa del Gobierno. Paralelamente se hacen públicos los presupuestos del Estado. En este desfile también acompaña a la Familia Real el ayudante general, el palafrenero y el presidente de la fundación Escolta de Honor de la Cavalerie. Después de tocar la canción de Hussar, la escolta de honor se ha trasladado a la plataforma para la procesión. Tan pronto como el estandarte del regimiento de Húsares Princesa Catarina Amalia pasa por la plataforma se baja el estandarte y el Rey devuelve el saludo de honor.
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Antes de subirse al carruaje, los Reyes y la Princesa han escuchado el himno nacional. Durante su paseo también se ha escuchado a algunos grupos de personas que les ha propinado silbidos y gritos y han mostrado banderas holandesas invertidas mientras pasaba la comitiva real, según informa la prensa local.
También los diputados participan de este cortejo que sale desde el Senado y de la Cámara de Representantes hacia el Teatro Real, donde ocupan su lugar antes de que el presidente abra la sesión. Una vez en el Teatro Real, y desde el trono, el Rey ha pronunciado el discurso institucional, que marca las líneas principales del país para el próximo año .
En su intervención, el monarca ha dicho que: "Vivimos en una época de contradicciones e incertidumbre. Es contradictorio que la pobreza aumente en un periodo de crecimiento económico. Que la gente de nuestro país se sienta sin libertad para expresar su opinión. Es preocupante que la gente esté perdiendo la confianza en el problema. Crece la incertidumbre sobre el mañana, sobre el poder adquisitivo, sobre la guerra en Ucrania, pero también se avecinan grandes cambios (...) Juntos trabajaremos por el bien de los Países Bajos. En estos tiempos inciertos, tengamos la esperanza en el hecho de que la mejora se logra paso a paso mediante la cooperación. Junto con las fuerzas positivas de nuestro país, continuaremos trabajando en soluciones para hoy y un buen futuro para todos los habitanres del Reino".
Esta jornada histórica se remonta a 1887 y hace referencia al cumpleaños del príncipe estatúder Guillermo V (1748-1806) y la vistosa procesión, que antes se hacía en la polémica carroza de oro, se viene desarrollando desde el año 1912. El día finaliza con la imagen desde el balcón, desde donde la Familia Real saluda al público congregado en los aledaños del Palacio de Noordeinde.
Mayor protagonismo como heredera
Después de empezar la universidad en Ámsterdam, Amalia de Países Bajos está teniendo un septiembre de lo más ajetreado. Hace unos días ejerció de anfitriona en una cena que se concedió al Consejo de Estado y todo apunta a que su agenda oficial de compromisos no haya hecho nada más que arrancar. Con motivo de su mayoría de edad, que cumplió el pasado diciembre, la heredera ha dado un paso al frente y cada vez participa de un mayor número de actividades de la agenda de la Casa Real. A principios de año viajará con sus padres al Caribe holandés donde conocerá Aruba, Curaçao y San Martín (que aunque son países independientes tienen al monarca holandés como jefe de Estado), además de visitar las islas de Bonaire, San Eustaquio y Saba.
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