Así es Alexia de Holanda, la 'princesa rebelde' que compartirá internado con Leonor

La hija mediana de los reyes de Holanda es la más parecida a su madre, tanto físicamente como en su espontaneidad

Actualizado 7 de marzo de 2021 - 18:52 CET7 mar 2021 - 18:52 CET

Hace unos días conocíamos el nombre de una de las compañeras de la princesa Leonor en el UWC Atlantic College cuando el próximo mes de agosto comience el bachillerato internacional en el prestigioso internado galés. Se trata de Alexia de Holanda, la hija mediana de Guillermo y Máxima de Holanda, de la misma edad que la Princesa de Asturias, pero con un estilo y una personalidad a primera vista muy diferentes, lo que no es óbice para que puedan convertirse en mejores amigas. Las diferencias comienzan por su posición en la línea sucesoria. Mientras Leonor es la heredera, con la resposabilidad que eso conlleva, Alexia ocupa la segunda posición y tal vez por ello, puede permitirse una mayor espontaneidad, aunque a veces, tanta naturalidad le haya jugado alguna mala pasada o le haya hecho ganarse el epíteto de "rebelde", un sambenito que siempre acaba llevando alguien en casi todas las casas reales. Pero, ¿cómo es realmente la princesa holandesa?

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Aunque ambas dominan el inglés perfectamente, Alexia y Leonor también podrán comunicarse en español, ya que la hija de Máxima de Holanda habla perfectamente la lengua materna de su madre, de la que ha heredado su físico y su naturalidad. Desde que era muy pequeña, la sonrisa de la hija mediana de los Reyes atraía los flashes como un imán y ya mostraba un carácter más extrovertido que sus hermanas, Amalia y Ariane, dejando ver su lado más divertido y expresivo en muchos de los posados famliares que nos ofrecía, lo que nos permitía vislumbrar a una Máxima en miniatura desde muy temprana edad.

Alexia de Holanda con su madre, Máxima — Máxima de Holanda comparte un extraordinario parecido con su hija mediana Alexia

Alexia de Holanda con sus hermanas Amalia y Ariane — Alexia de Holanda, junto a sus hermanas Amalia y Ariane en uno de los últimos posados familiares que han protagonizado

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Además del evidente parecido físico, la llegada de la adolescencia constató que Alexia tambien compartía muchas de las claves de estilo de su madre. La Princesa pronto comenzó a despuntar como toda una 'it girl', causando sensación en cada uno de sus posados, en los que cada vez se subía a tacones más elevados. Además, comenzó a maquillarse discretamente en torno a los 14 años, cuando durante una escapada a la nieve en 2019 dejó claro a golpe de máscara de pestañas y de un ligero pero favorecedor contouring que ya había dejado atrás la niñez definitivamente.

Además de tener un estilo propio y ya muy admirado, Alexia de Holanda ha demostrado tener una personalidad arrolladora que también recuerda en buena medida a la de su madre. Cercana, natural y muy alegre, así se ha mostrado siempre la joven que no ha dudado, durante la pasada celebración del Día del Rey en su país, en contar con toda franqueza cómo ve a sus progenitores. “Creo que mis padres están bastante bien… ¡son muy buenos padres!”, aseguró divertida. Entre sus aficiones se encuentra el hockey, deporte muy popular en Holanda, la equitación y la música. En este sentido es muy probable que le seduzcan los ritmos españoles, a juzgar por lo integrada que se le veían en la última visita que realizó con su familia a la Feria de Abril de Sevilla, donde la vimos luciendo el traje de flamenca con tanto arte que bien parecía que había crecido a orillas del Guadalquivir.

Además del deporte o la música, sus intereses no son diferentes a los de la mayoría de las chicas de su generación, aunque en ocasiones puedan chocar con sus obligaciones como miembro de la realeza. Es el caso de las redes sociales, cuya actividad en ellas le ha valido alguna que otra polémica y que le colgaran el cartel de la rebelde de los Orange. En 2018, cuando tenía 13 años se filtraron imágenes que publicaba en un perfil privado que mantenía con un pseudónimo. Tras salir a la luz, eliminó la cuenta, pero poco después proliferaron varios perfiles tratando de suplantar su identidad. Sin embargo, su flirteo con las aplicaciones social no quedó ahí, ya que el año pasado se difundió un vídeo en el que salía bailando con un grupo de amigas y cantando un rap con un vocabulario no demasiado afortunado en boca de una princesa. La polémica ya estaba servida y es que, aunque sus padres siempre han querido que viviese como cualquier otra chica de su edad, hay determinados límites que a la segunda en la sucesión del trono no se le permiten cruzar.

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