,type=downsize)
Es la primera vez que Máxima de Holanda regresa a su tierra natal como Reina y, claro, la expectación que ha levantado esta visita era importante. La Monarca ya había estado en su país de manera privada pero este es su primer viaje oficial y lo hace en calidad de asesora de la ONU. Su agenda comenzó con una reunión con la canciller Susana Malcorra, un encuentro con el titular del Banco Central, Federico Sturzenegger, con el que participó en una mesa sobre los "Desafíos para fortalecer y expandir la inclusión financiera en Argentina" y una conferencia en la Universidad Católica Argentina (UCA), donde ella misma se graduó como economista en 1995.
© Cordon PressFue precisamente en esta última cita donde se sumaron las anécdotas más curiosas de esta primera jornada de visita. Y es que en primera fila en dicha conferencia se encontraban los padres de la Reina, Jorge Zorreguieta y María del Carmen Cerruti, quienes escucharon con orgullo las palabras de su hija. Nada más terminar la charla, rompiendo todo el protocolo, Máxima bajó del estrado para abrazar a sus padres y darles un beso. Y es que además de Reina, es ante todo una hija cariñosa que no ve a sus progenitores todo lo que le gustaría.
© Cordon PressNatural y espontánea son dos de las cualidades que demuestra en cada una de sus apariciones y lo ha vuelto a hacer en esta. Antes de comenzar a hablar ante un nutrido grupo de estudiantes y docentes, se levantó y tendió la mano desde el escenario al que había sido en su momento su profesor, el economista Javier Villanueva, al que reconoció entre la gente y con el que intercambió unas palabras. Antes de marcharse del auditorio, estuvo hablando también con otros profesores y lanzó un beso al aire, otro gesto cargado de significado que muestra la gran alegría que siente al estar en su país.
© Cordon PressAsí es Máxima, la sonriente reina de los tulipanes que ha cautivado al mundo
© Gtresonline
