Su espontaneidad y su naturalidad han cautivado al mundo. La vida de la argentina Máxima Zorreguieta cambió de manera radical cuando conoció al entonces Príncipe Heredero de los Países Bajos, Guillermo de Holanda. Tradición y futuro se unieron en su romántica boda que se celebró el 2 de febrero de 2002, un día en que se unieron sus destinos y se conoció a la futura Reina de Holanda.
En estos años su entrega, su naturalidad y espontaneidad, su sonrisa y su estilo han cautivado al mundo, convirtiéndola en uno de los miembros de la realeza europea más queridos.
La reina Letizia, Magdalena de Suecia, Máxima de Holanda... y sus destinos 'reales' de vacaciones
Máxima de Holanda viste de oro su 45º cumpleaños