Para el acto eligió un nuevo vestido floral sin precedentes, con un inesperado estampado arty y con una de sus siluetas preferidas y más favorecedoras: una pieza de cuello a la caja, manga francesa, cuerpo entallado y falda midi de vuelo que aporta volumen. El diseño, de grandes flores teñidas de tonos lilas, verdes y corales, estaba rubricado por Carolina Herrera, una de sus firmas predilectas para eventos importantes