La sobrina del rey Felipe VI acudía este jueves a primera hora de la mañana al centro de exámenes situado en la localidad madrileña de Móstoles. Lo hacía visiblemente nerviosa y acompañada de unas amigas, con las que esperó pacientemente a que llegara su turno para acceder al aula correspondiente y poder así demostrar sus conocimientos teóricos en el test de conducción, previo paso y condición sine qua non para poder presentarse después a la prueba práctica.