Felipe de Borbón y Grecia, entonces príncipe de Asturias, lo recibió el 3 de mayo en la Zarzuela y así quedó reflejado en un Real Decreto que salió publicado doce días después con unas cariñosas palabras:“Siguiendo la tradición de la Monarquía española y para dar testimonio de Mi cariño a Mi amado hijo Felipe, Príncipe de Asturias y Heredero de la Corona; Oído en el Consejo de Ministros, Vengo a nombrarle Caballero de la Insigne Ordel del Toisón de Oro”.