La princesa Leonor dice adiós a otra etapa y abandona España rumbo a América. Aunque ha viajado fuera de nuestras fronteras en otras ocasiones, es la primera vez que surcará la inmensidad del océano Atlántico a bordo de un velero como parte de su formación militar. El buque escuela de La Armada Juan Sebastián de Elcano ha abandonado este jueves por la tarde Las Palmas de Gran Canaria con destino a Brasil, a donde arribará el 14 de febrero.
La heredera al trono y el resto de guardiamarinas han despedido a todos los curiosos que se han acercado al muelle para ser testigos en primera persona de este momento histórico, y es que la presencia de la hija mayor de los Reyes ha generado una gran expectación y revuelo en la isla. Todos se han quitado la gorra blanca y azul de su uniforme de La Armada y la han ondeado mientras decían adiós. Los gestos de complicidad entre ellos dejan patente lo bonita que está siendo esta experiencia y los lazos de amistad que están forjando en esta etapa formativa que pasan lejos de sus familias, en alta mar.
La princesa de Asturias ha permanecido en suelo canario desde hace una semana. El primer muelle del archipiélago que Elcano tocó fue el de Tenerife, donde permaneció durante el pasado fin de semana y donde la Princesa tuvo oportunidad de conocer los encantos de la isla, además de participar en almuerzos a bordo con las autoridades locales, al igual que ocurrió en Las Palmas. Este lunes, el navío soltaba amarras rumbo a la isla vecina, Gran Canaria, a donde llegó el martes y fue recibido con gran exaptación y entusiasmo en Las Palmas.
Elcano, además de un buque dedicado a la formación de sus guardiamarinas, incluida Leonor, es también una embajada flotante y es recibido en cada puerto con una verdadera fiesta. Primero, los tinerfeños y después, los palmenses pudieron recorrer la cubierta de esta emblemática embarcación velera que en tres años cumplirá un siglo circundando el mundo. Además de ser los últimos puertos antes de la singladura transoceánica, el paso de la Princesa por Canarias ha sido significativo, pues no hay constancia de que haya pisado las islas de manera pública.
Tras zarpar del muelle de Las Palmas, Leonor, sus compañeros guardiamarinas y el resto de la tripulación asumen el mayor desafío del 97º crucero de Elcano: cruzar el Atlántico. Serán 22 días en alta mar, asumiendo los mayores retos de la navegación y también una estrecha convivencia hasta que el 14 de febrero lleguen a Salvador de Bahía (Brasil). Por tierras brasileñas, la Princesa estará cinco días, para después seguir con la ruta.
El Juan Sebastián de Elcano, que debe su nombre al marino vasco que dio la primera vuelta al mundo, partió el 11 de enero de la bahía de Cádiz, en un emotivo acto que presidieron los Reyes, quienes también acudieron como padres. La emoción fue patente y la reina Letizia dijo sobre sus lágrimas en el adiós a su hija que “son muchos meses sin verla”.
18.000 millas náuticas y varios países
Durante seis meses (la Princesa estará uno menos en el barco porque el trayecto de vuelta lo hará en avión) Elcano y sus navegantes surcarán 18.000 millas náuticas. Tras dejar atrás el territorio nacional cruzarán el Atlántico, llegarán a Brasil, Montevideo (Uruguay) para ir a Punta Arenas, en la Patagonia chilena. Cruzarán el estrecho de Magallanes para continuar singladura por el océano Pacífico y subir a Valparaíso (Chile), El Callao (Perú), Ciudad de Panamá (Panamá), Cartagena de Indias (Colombia), Santo Domingo (República Dominicana) y Nueva York (Estados Unidos) a donde llegará el 5 de junio.
A primeros de junio, la guardiamarina Borbón Ortiz emprenderá el camino de regreso a España para pasar su sexto mes en el mar en una fragata de la Armada para seguir aprendiendo. El 3 de julio volverá a reembarcarse siguiendo con sus compañeros la ruta hacia Ferrol y Marín, donde se encuentra la Escuela Naval en la que ella ingresó el pasado agosto. En la localidad pontevedresa se pondrá fin a este crucero el 14 de julio, dos días antes de la entrega de despachos el día del Carmen.