La princesa Leonor ha protagonizado un curioso momento durante su nombramiento como alcaldesa honoraria de Oviedo en el Ayuntamiento de la ciudad. Ha ocurrido precisamente al recibir el medallón de la Corporación, uno de los simbólicos objetos que se le han concedido y que también obtuvo en 1988 su padre, Felipe VI. La princesa de Asturias ha necesitado la ayuda del ayudante de campo de los Reyes para colocar su pelo y, de hecho, ella misma ha estado ajustando su melena durante un buen rato. Una anécdota que nos recuerda a la que ocurrió hace casi un año, durante su 18 cumpleaños, cuando los reyes Felipe y Letizia tuvieron que ayudar a su hija con esta misma labor.
El simpático discurso de Leonor en el Pueblo Ejemplar con una improvisación y guiño al queso CabralesPor Martín Gálvez Piqueras
