Este sábado, la reina Letizia cumplirá un aniversario. Este 2024 ha estado marcado por los 20 años de matrimonio con el rey Felipe, sus diez como Reina, la mayoría de edad de la princesa Leonor y las dos décadas que lleva acudiendo al desfile militar de la Fiesta Nacional y a la posterior recepción en el Palacio Real. El 12 de octubre de 2004, cinco meses después de casarse y recién estrenada como princesa de Asturias, debutó en este solemne acto militar. Desde entonces, la Reina no ha faltado en ninguna ocasión, aunque la foto de la tribuna ha ido transformándose según iban cambiando los integrantes de la Familia Real.
El estreno de una princesa
La primera vez que se vio la reina Letizia participando en el Día de la Hispanidad fue el 12 de octubre de 2004. Unos meses antes, en mayo, se había casado con el heredero a la Corona, en la que fue la primera boda real de Estado que se celebraba en España en un siglo. Doña Letizia optó por un look sobrio y otoñal de Felipe Varela y siguiendo el protocolo se situó a la derecha de don Felipe para seguir la marcha de las Fuerzas Armadas. Aquel año, la tribuna real estaba repleta. Además de los reyes Juan Carlos y Sofía presidieron el acto la infanta Elena, con Jaime de Marichalar, y la infanta Cristina, con Iñaki Urdangarin. Todos juntos estuvieron también en la recepción del Palacio Real.
A punto de dar a luz
El de 2005 fue el desfile de doña Letizia más ilusionante. Estaba embarazada de casi nueve meses de su primogénita, la princesa Leonor, lo que hacía aún más relevante y significativa su presencia. Con un vestido color maquillaje y un abrigo al tono, se la vio feliz por el momento que estaba viviendo. Quince días después, el 31 de octubre, nació su hija en el hospital Ruber Internacional de Madrid, la futura heredera a la Corona que garantizaba la sucesión y que está a punto de cumplir 19 años. Aguantó de pie las cerca de dos horas que duró el desfile militar.
Embarazada de la infanta Sofía
En octubre de 2006, la reina Letizia acudió con una de sus fórmulas estilísticas preferidas para los actos más solemnes: abrigo y vestido. Semanas antes, la Casa Real anunció que estaba embarazada y que se encontraba bien. Estaba de pocos meses de gestación y apenas se apreciaba su figura premamá. Fue la primera vez que la vimos con unas modernas gafas de sol negras de gran tamaño, para protegerse de la intensa claridad, un complemento que repitió en ediciones posteriores del 12 de octubre. Ese año también arrancó su agenda en solitario
Sus comentadas medias grises y su pelo rizado
Un año después, la reina Letizia impactó con una apuesta estilística diferente y que no ha vuelto a repetir. Eligió un vestido azul, con un abrigo al tono y unas tupidas medias grises oscuras que fueron de lo más comentadas. Desde entonces, la Reina ha preferido usar medias color natural o, directamente, no usar medias en los actos más importantes de la Casa Real. También generó mucho interés su peinado con ondas y sus gafas de sol de tipo aviador. El 12 de octubre de 2007 ya era madre de sus dos hijas pues la infanta Sofía nació seis meses antes. Ese año fue en el que su agenda en solitario como princesa de Asturias empezó a despegar y a diferenciarse de la de don Felipe. Desde entonces ha participado en numerosos actos y se comprometió con causas con las que aún sigue muy involucrada, como las enfermedades raras, la lucha contra el cáncer y la promoción de la cultura.
En 2008, primera vez que se reduce el número de miembros de la Familia Real
El tiempo típicamente otoñal que hizo el 12 de octubre de 2008 obligó a que el salto de los paracaidistas no se llevara a cabo. La Reina se decantó por un favorecedor abrigo labrado en color hielo con un colorido bolso morado de Hugo Boss, así como los pendientes largos de diamantes y perlas australianas que reserva para sus fechas más señaladas. Fue la primera vez en que el número de miembros de la Familia Real se redujo. Casi un año antes, el 13 de noviembre de 2007, la Casa Real anunció el “cese temporal de la convivencia” de la infanta Elena y Jaime de Marichalar.
Una agenda imparable
En su quinta vez en el Día de la Hispanidad, doña Letizia y don Felipe se mostraron como el gran activo de la Corona. Su presencia pública y trabajo creció sobremanera, en un año, el 2009, en el que la crisis económica azotaba a España y especialmente notorio era el tirón de la ahora Reina. Lució un conjunto malva con abalorios y para ver desfilar a los Cuerpos de Seguridad del Estado volvió a recurrir a unas gafas de sol de estilo sesentero.
En 2010 marcó la diferencia y la polémica
En 2010 la reina Letizia sorprendió al lucir pantalones por primera y única vez en estas dos décadas acudiendo a los actos del Día de la Hispanidad. Su apuesta fue el centro de la polémica por saltarse el protocolo que señalaba falda midi o vestido para las damas. Su presencia pública ese año seguía imparable y un mes antes de este solemne acontecimiento castrense, asumió la presidencia de honor de la Asociación Española contra El Cáncer y su Fundación Científica. Fue la primera ocasión en la que aceptaba una presidencia de estas características con carácter permanente y lo hizo por el impacto de la enfermedad en la sociedad y por la relevancia de la asociación en la lucha contra el cáncer a través de la investigación, la información, las campañas de prevención y el voluntariado. Desde entonces su implicación sigue activa y a día de hoy es uno de los focos de su trabajo.
El desfile que tuvo muchos cambios
La Fiesta Nacional del 12 de octubre de 2011 tuvo muchos cambios. Fue un poco más largo de lo habitual y don Juan Carlos pasó revista a las tropas en un vehículo debido a su reciente operación en el tendón de Aquiles. También se acortó el tradicional besamanos por un saludo general a las principales autoridades. Fue la primera vez que se colocaron sillas en el palco presidencial. La reina Letizia apostó por un sencillo traje de tweed de lo más otoñal. Fue la última vez que la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin acudieron a un acto de la Casa Real
La reducción de la Familia Real
En 2012 tuvo lugar otro cambio significativo. El acto estuvo presidido por los reyes Juan Carlos y Sofía y por don Felipe y doña Letizia. La infanta Elena siguió el acto desde una grada, con otras autoridades, y la infanta Cristina e Iñaki Urdangarin no acudieron. Ese año, la presencia institucional se centró en los cuatro Reyes. El Caso Nóos ya había estallado y se estableció un cortafuegos institucional.
El último 12 de octubre como Princesa de Asturias
La primera vez que los reyes Felipe y Letizia presidieron el Día de la Hispanidad fue en 2013, el último año que fueron príncipes de Asturias. Don Juan Carlos estaba aún convaleciente de una operación de cadera. Estuvieron solos en el acto castrense, aunque la reina Sofía y la infanta Elena sí estuvieron en la recepción posterior con los invitados. Fue un desfile corto y sencillo y que estuvo marcado por la austeridad y los recortes. Además, los honores que recibieron don Felipe y doña Letizia fueron distintos para ajustarse a lo que establece la ley de cara al heredero. Meses después se produciría el relevo en el trono.
El primero como Reina y con Leonor y Sofía
Cuatro meses después de la proclamación de Felipe VI, el 12 de octubre de 2014, doña Letizia acudió al acto por primera vez como Reina. Doña Letizia estuvo en todo momento pendiente de sus hijas. Leonor estaba a punto de cumplir 9 años y Sofía tenía 7. Siguieron perfectamente el protocolo, pero como niñas que era protagonizaron grandes momentos cargados de espontaneidad. Leonor se colocó a la derecha de su madre, quien le dio grandes muestras de cariño y doña Letizia no dudó en explicarles cada una de las cosas que iban sucediendo. El palco cambió, pues con el nuevo reinado se recuperó el tradicional fondo rojo carmesí de la monarquía española (en la era de don Juan Carlos era azul).
Leonor y Sofía, cada vez más desenvueltas
En 2015, la reina Letizia ya no tuvo que estar tan pendiente de sus hijas. Leonor y Sofía saludaron a las autoridades con gran soltura y no perdieron detalle de nada. Aunque eran solo unas niñas, las ‘tablas’ ya se iban notando y se las vio disfrutar de la solemnidad del evento. La reina se decantó por el azul y por los pendientes de aguamarinas que habrían sido un regalo del Rey a su esposa cuando nació la princesa de Asturias, tal y como informó ¡HOLA! La propia Leonor los llevó el año pasado en Oviedo durante la ceremonia de entrega de los premios que llevan su nombre.
El desfile de 2016 pasado por agua y con Gobierno en funciones
En 2016, la reina Letizia eligió un favorecedor diseño blanco de Felipe Varela con cristales y georgette de seda en negro. La pieza no se libró de la polémica, pues muchos apuntaron que era muy similar a un diseño de Óscar de la Renta. Fue el primer desfile del día de la Fiesta Nacional que se llevó a cabo con un Gobierno en funciones y el tercero al que acudió como Reina. No faltaron la princesa Leonor y la infanta Sofía que volvieron a deleitarnos con las imágenes más divertidas. El agua hizo que la parada militar fuera más breve.
La imagen más imponente
La reina Letizia dejó una imagen imponente en la Fiesta Nacional de 2017. Llevó por primera vez el gran broche de las Reinas de España, una joya de pasar de la reina Victoria Eugenia, creada en el siglo XIX por la joyería Ansorena con dos perlas unidas por un diamante de talla almohadilla. Una es circular y está orlada con doce brillantes y la otra tiene forma de perla. Fue el año en el que la infanta Sofía llevó su brazo vendado.
El protagonismo de Leonor
El de 2018 fue el año en el que la princesa Leonor tuvo un gran protagonismo. Fue la primera vez que la heredera al trono lució en un acto público la insignia de Toisón de Oro, que su padre le impuso unos meses antes. Leonor fue la primera princesa de Asturias y la cuarta mujer en la historia, ya que su abuelo se lo concedió en la última mitad de la década de los años ochenta a la reina Margarita de Dinamarca, Isabel II de Reino Unido y Beatriz de Holanda. Además, se situó por primera vez a la derecha de su padre en el palco presidencial, mientras que su hermana se sentó junto a doña Letizia.
Una Reina con 'look' de bailarina
La reina Letizia estrenó un vestido bailarina de seda y tul rosa talco de inspiración bailarina en 2019. Un look que fue muy aplaudido internacionalmente y también llevó por primera vez unos pendientes que pertenecieron a doña Sofía. La anécdota de la jornada fue la que protagonizó el paracaidista al quedarse enganchado en una farola durante su descenso. Tras el desfile, los Reyes y sus hijas se acercaron a saludar al paracaidista que portaba la bandera para ver cómo se encontraba.
Primer año de mascarilla
El covid hizo que el Día de la Hispanidad de 2020 fuera muy diferente. Con mascarilla, la Reina eligió el rojo para un desfile adaptado a la situación sanitaria que fue menos multitudinario y que tuvo lugar en la Plaza de la Armería del Palacio Real. Fue la primera vez que las hijas de los Reyes marcaron la diferencia con sus atuendos: Leonor, con falda, y Sofía, con pantalones. La ceremonia estuvo marcada por la crisis sanitaria y se condecoró a los representantes de los tres ejércitos que habían participado en la Operación Balmis para luchar contra la pandemia.
La ausencia de Leonor
El de 2021 fue el segundo y último año en el que se vio a la Reina con mascarilla. También fue el primero en el que la princesa Leonor faltó por encontrarse estudiando en Gales el primer curso de bachillerato internacional. Esto hizo que la infanta Sofía se colocara a la derecha de su padre en el desfile y se recuperó la recepción en el Palacio Real tras haber dado por superado los peores momentos de la covid.
El año de la vuelta a la normalidad
Un año después, la normalidad volvía al desfile del 12 de octubre. La Reina eligió un moño bajo y un vestido de manga larga en color verde con pequeños lunares para un Día de la Hispanidad en el que ya no había mascarillas. En el palco real, la gran ausente fue la princesa de Asturias, quien por segunda vez consecutiva se ausentaba de la gran cita castrense para finalizar sus estudios de bachillerato internacional en Gales. La infanta Sofía ‘ocupó’ el lugar de su hermana colocándose a la derecha de don Felipe y protagonizando mucha complicidad.
El gran paso militar de Leonor
El último desfile militar de la Fiesta Nacional supuso un antes y un después. Fue la primera vez que la princesa Leonor acudió a la cita como militar, haciendo el saludo castrense a las autoridades y donde demostró una sintonía total con su padre. La Reina pasó a un segundo plano dejando brillar en el gran debut de su hija, quien sin cambiarse de ropa, y con el uniforme de gala del Ejército de Tierra, se estrenó en la recepción posterior en el Palacio Real. En el Salón del Trono, Leonor priorizó su posición actual de aquel entonces, dama cadete en la Academia Militar de Zaragoza, frente a su papel como Princesa.
Los Reyes y la princesa de Asturias presiden un 12 de octubre con la lluvia como gran protagonista