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Galicia está lleno de recuerdos para Felipe VI ya que fue su hogar a finales de los años 80, mientras se formaba en la Armada. Precisamente una cita castrense le ha llevado, cuatro décadas después, de regreso a esta zona en el que ha disfrutado de la gastronomía local acompañado de su esposa, la reina Letizia. Una salida que se ha producido horas después de su encuentro con don Juan Carlos y la princesa Leonor.
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Desde Marín, donde ha tenido lugar el encuentro con el anterior jefe del Estado y la heredera al trono, los Reyes se han desplazado unos ocho kilómetros hasta el restaurante O Peirao de Combarro, donde ha tenido lugar la cena privada para celebrar los 40 años de la jura de bandera de la promoción de la Armada del Rey. La velada, por tanto, ha sido compartida con los compañeros del monarca, quien hizo muy buenas amistades durante su paso por los tres ejércitos y no ha perdido el contacto con ellos.
En el establecimiento, situado en la Plaza Peirao da Rúa, en pleno casco histórico, nos aseguran que ha sido una velada "muy amena" en la que han degustado productos gallegos como pulpo, empanadas y sardinas. Y es que en la carta del restaurante apuestan por la materia prima de la tierra. No había más comensales aparte de don Felipe y sus compañeros, ya que se trataba de un grupo extenso y no había capacidad para más gente.
La visita de los Reyes ha supuesto el broche perfecto al 50 aniversario del restaurante, en el que don Felipe ha estado un total de cuatro veces, la primera de ellas cuando entró en la Escuela Naval de Marín en la que ahora se prepara su hija mayor, la princesa Leonor. Para doña Letizia sí ha sido su primera vez. Desde el local aseguran que les ha encantado conocerla y la definen como "muy agradable".
Los Reyes han sido fotografiados por las calles de Combaro, pueblo marinero construido íntegramente en granito y conocido por sus icónicos hórreos. También son un elemento histórico los siete cruceros de granito construidos entre el siglo XVIII y XX que todavía se conservan. Declarado Conjunto Artístico y Pintoresco en el año 1972, es uno de los destinos preferidos de los turistas.
Para esta salida con sus compañeros, don Felipe ha apostado por pantalones vaqueros, americana y camisa. Un look sport al que también se ha sumado doña Letizia, con pantalones negros, gabardinas y mocasines planos. Además, la Reina llevaba el cuello protegido por un pañuelo puesto que los termómetros rondan los 12 grados en esta zona de Galicia.
El encuentro familiar previo
La llegada de los Reyes a Galicia se ha producido sobre las siete de la tarde. Ha aterrizado en Vigo y desde ahí se han trasladado a la Escuela Naval de Marín, donde han estado con la princesa de Asturias, que lleva desde el 30 de agosto en esta academia en la que ha realizado sus primeras maniobras de rescate montada en una lancha de instrucción. También ha disfrutado ya de la gastronomía y el ocio local saliendo a cenar con sus compañeros. Juan Carlos I se encuentra desde el martes en Sanxenxo para participar en las regatas que llevan su nombre y ha pedido ir a ver a su nieta. Ha sido entonces cuando se ha producido este breve encuentro de los cuatro.